España: huelga general contra el tijeretazo del gobierno
El plan de ajuste económico, aprobado de urgencia en mayo por el Gobierno español para reducir el déficit público, ha provocado la indignación de los sindicatos de todo el país, que han llamado a una huelga general el 8 de junio.
El paquete de medidas extraordinarias propuesto por el gobierno de Rodríguez Zapatero es un duro golpe a pensionistas, empleados públicos, personas dependientes y parados.
En concreto, los recortes salariales impuestos supondrán una reducción media en los sueldos del profesorado de la enseñanza pública de entre el 5,5 y el 7,5%.
Esta medida afectará a unos 500.000 docentes que imparten enseñanza en centros públicos no universitarios en todo el territorio español.
Se trata de un plan que reduce drásticamente la inversión pública lo que, en opinión del Secretario General de la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras, José Campos Trujillo, “contribuirá a prolongar los indicadores de recesión y a desplazar la creación de empleo como objetivo central de la actividad económica”.
Carlos López Cortiña, Secretario General de la Federación de Enseñanza de la Unión General de Trabajadores, ha afirmado que “la propuesta del gobierno no es una salida para la crisis, no se hace recaer los esfuerzos en quienes la originaron y pretenden que los trabajadores y trabajadoras que no la hemos provocado seamos los que paguemos los platos rotos”.
Por su parte, representantes de la Confederación Intersindical, STEs, insistieron en el hecho de que las medidas se centran en la disminución del gasto público, sin intentar aumentar los ingresos del Estado a través de la lucha contra el fraude fiscal y la economía sumergida, el incremento de la progresividad de los impuestos o la imposición de tributos sobre los movimientos de capital.
La IE se solidariza con los docentes españoles y con la lucha sindical que están llevando a cabo en estos momentos para defender sus derechos y garantizar una educación pública de calidad para el futuro.