Ei-iE

La IE ha acogido positivamente una iniciativa ciudadana europea que pide a los gobiernos que no consideren la inversión en educación como una parte del déficit. La iniciativa propone "excluir del cálculo del déficit del gasto público de cada país la parte que el gobierno invierta en educación que esté por debajo de la media de la zona euro en los últimos cinco años".

Esta iniciativa permite que un millón de ciudadanos europeos participen directamente en el desarrollo de políticas de la UE instando a la Comisión Europea a crear una propuesta legislativa para un tema que consideran importante para mejorar la vida de los ciudadanos europeos y garantizar un futuro mejor para las generaciones más jóvenes.

¡La educación merece cualquier gasto!

Sus objetivos son:

·         Combatir la desigualdad ofreciendo igualdad de oportunidades para la educación y la formación a toda la juventud europea.

·         Garantizar infraestructuras adecuadas y apropiadas y herramientas para una educación de alta calidad en Europa en tiempos de crisis.

·         Impulsar y asegurar el crecimiento, el desarrollo y las instituciones democráticas; asegurar las oportunidades de trabajar de las jóvenes generaciones a través de la inversión en educación.

·         Apoyar la Política Europea Horizonte 2020.

Desde 2009, se han aplicado en toda Europa programas de austeridad muy estrictos para consolidar el gasto público. Sin embargo, los expertos y las organizaciones internacionales están empezando a cuestionar la efectividad económica de las medidas de austeridad y las causas que han originado la crisis. Los efectos negativos a corto y largo plazo de las medidas de austeridad sobre los procesos democráticos y los estándares de los derechos sociales también están siendo objeto de críticas.

Según los datos disponibles, en 2011 y 2012 se aplicaron recortes en educación en 20 países. Los recortes superaron el cinco por ciento en Grecia, Italia, Chipre, Letonia, Lituania, Hungría, Portugal, Rumanía, Reino Unido (Gales) y Croacia.  Los recortes se mantuvieron entre el uno y el cinco por ciento en la Comunidad Francesa de Bélgica, Bulgaria, la República Checa, Estonia, Irlanda, España, Francia, Polonia, Eslovenia, Eslovaquia y Escocia.

La recesión es difícil para toda la juventud, pero lo es más para la juventud menos formada que para la juventud con una buena formación. Datos internacionales muestran que niveles educativos diferentes han originado grandes desigualdades en los resultados del mercado laboral, tanto en esta generación de jóvenes como entre generaciones: la juventud se ha visto significativamente más afectada por la crisis, y este impacto es incluso mayor entre la juventud con menos formación. Esto destaca la importancia de la educación como inversión a largo plazo personal y social.

Debemos proteger la inversión en educación

Esta Iniciativa Ciudadana Europea destaca que el papel principal de la educación es su contribución al crecimiento económico a largo plazo. Para garantizar que la recesión no tiene un impacto negativo en la educación, explican, se debería eliminar del balance fiscal un gasto mínimo en educación (p.ej. a través de préstamos/subvenciones especiales). Sería razonable permitir un gasto anual de hasta el cinco por ciento del producto interior bruto (PIB) en el último año antes de la recesión, o el gasto real nacional en el mismo año, lo que sea superior. Ello mantendría los estándares en los países avanzados y estimularía el crecimiento en los países que se encuentran por debajo de la media. El incremento en el presupuesto debería relacionarse con reformas estructurales e inversiones en investigación y desarrollo. Todos los países han establecido objetivos cualitativos y cuantitativos dentro de la política europea 2020 que deberían respetarse para que Europa sea más competitiva.

Una consecuencia del segundo papel de la educación es que el mejor momento para incrementar el éxito educativo, desde un punto de vista social, es la recesión. La educación es una inversión: el principal gasto social de esta inversión es el resultado del estudiante. El resultado es una mayor productividad y menos desempleo.

Necesitamos una política de crecimiento inteligente y centrarnos en la educación

Como señala el Panorama de la Educación 2013 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE)), invertir en educación siempre compensa a largo plazo y los Estados Miembros no se pueden permitir olvidar esto en la asignación de los presupuestos públicos. Más de la mitad del crecimiento del PIB en los países de la OCDE a lo largo de la última década está relacionado con el crecimiento de las rentas del trabajo entre los trabajadores con formación superior.

La educación, una inversión

"Las crisis económicas vienen y van, pero la juventud solo tiene una oportunidad para adquirir las aptitudes que les permitirán encontrar trabajo y les ayudarán a embarcarse en una carrera exitosa", dijo el Economista Premio Nobel Christopher Pissarides, Profesor Emérito de Económicas en la London School of Economics. "Reducir la inversión en educación debido a una crisis económica temporal es una solución sin visión de futuro. Podría destruir las vidas de toda una generación de jóvenes. El gasto en educación es una inversión en nuestro futuro y no debería formar parte del balance fiscal del gobierno".

El Secretario General de la IE, Fred van Leeuwen, dijo que la IE está muy de acuerdo con el espíritu de esta iniciativa ciudadana. "La asignación en educación no se debería considerar un gasto", dijo. "La educación es una inversión en un futuro sano y sostenible".

"La IE promueve firmemente la necesidad de invertir públicamente en una educación de calidad a todos los niveles, desde la enseñanza preescolar hasta la educación superior", añadió.

Puede inscribirse en esta iniciativa ciudadana europea aquí

Más información sobre la iniciativa disponible aquí