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La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) considera que en las sociedades modernas, la vida se reduce a solucionar problemas. Los cambios en la sociedad, el entorno y la tecnología hacen que el contenido del conocimiento aplicable evolucione rápidamente. Adaptarse, aprender, atreverse a probar cosas nuevas y estar siempre dispuesto a aprender de los errores se encuentran entre las claves de la adaptación y el éxito en un mundo impredecible. La Internacional de la Educación (IE) apoya firmemente la idea de que los estudiantes deben adquirir estas capacidades como parte de una educación de calidad.

La pregunta que plantean los autores del informe es: ¿están adquiriendo nuestros jóvenes de 15 años las capacidades de resolución de problemas necesarias para el siglo XXI? Asimismo, el informe comunica los resultados de la evaluación PISA 2012 sobre la capacidad de resolución de problemas que se realizó por ordenador a cerca de 85.000 estudiantes de 44 países.

Tal y como reflejan los resultados generales de PISA 2012, los estudiantes de los países del Este de Asia, como Singapur, Corea y Japón, son los que mejor han puntuado en la capacidad de resolución de problemas, por encima de los estudiantes de todos los demás países y economías participantes. En los países de la OCDE, el 11,4% de los estudiantes de 15 años ha alcanzado la puntuación más alta en la resolución de problemas. Los mejores estudiantes suelen alcanzar los niveles más altos en la resolución de problemas, lo que significa que pueden analizar sistemáticamente una situación hipotética compleja, discurrir soluciones en varios pasos, tener en cuenta todas las limitaciones y adaptar sus planes, en vista de los comentarios recibidos.

La OCDE utiliza criterios de evaluación complejos, divide los resultados de los estudiantes en seis niveles y los correlaciona con los resultados en matemáticas, ciencias y comprensión lectora, además de tener en cuenta el género, la situación socioeconómica y la situación migratoria.

"La Internacional de la Educación ha acogido positivamente las conclusiones del Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes (PISA), y en particular este informe, y los considera visiones muy útiles de los procesos de aprendizaje, más allá de las matemáticas y la comprensión lectora", señaló el Secretario General de la IE, Fred van Leeuwen. "A pesar de que se podría cuestionar si tareas basadas en la informática, como ajustar el control climático, operar un reproductor MP3 o encontrar la mejor ruta de viaje en una ciudad desconocida, comprenden el alcance y el significado de la resolución creativa de problemas, este análisis sí ayuda a situar la educación dentro de un contexto más amplio y a destacar varios mensajes políticos importantes".

Una conclusión política fundamental que se desprende del estudio es la necesidad de ofrecer a los estudiantes una mayor diversidad y creatividad en el plan de estudios. El informe concluye que, incluso aunque haya una correlación entre los buenos resultados en matemáticas, lectura y ciencias y la resolución de problemas, si nos fijamos mejor en varios tipos de competencias de resolución de problemas, es evidente que en algunos países, los estudiantes con resultados no tan buenos pueden demostrar grandes capacidades a la hora de enfrentarse a situaciones de la vida cotidiana y viceversa. No cabe duda de que enseñar para aprobar los exámenes estandarizados no es una vía válida para crear competencias y capacidades para el siglo XXI, como señala la OCDE.

A pesar de que no hay grandes diferencias en general entre los resultados medios de los niños y las niñas en materia de resolución de problemas, algunos países que sí muestran diferencias de género significativas en los resultados de la resolución de problemas pueden no estar ofreciendo a los niños y las niñas oportunidades equitativas en la educación, particularmente si estas diferencias también son palpables en otras materias. A menos que los países inviertan tanto en el desarrollo de las capacidades de las niñas como lo hacen en las de los niños, bajarán posiciones en la competición global por el talento.

El estudio también destaca la importancia de reducir las desigualdades basadas en el entorno socioeconómico. El acceso desigual a una educación de alta calidad implica que el riesgo de no alcanzar el nivel mínimo en materia de resolución de problemas es, como media, aproximadamente el doble de alto para los estudiantes más desfavorecidos que para sus compañeros más favorecidos. El hecho de que las desigualdades en las oportunidades educativas vayan más allá de las asignaturas escolares individuales y se extiendan hasta los resultados en la resolución de problemas, destaca la importancia de promover oportunidades de aprendizaje iguales para todos.

Dado que las desigualdades actuales tienen consecuencias muy significativas a largo plazo, se espera que las políticas orientadas a reducir las desigualdades socioeconómicas en la educación beneficien las vidas de los estudiantes mucho más allá de sus años en la escuela.