Dublín: luchas distintas pero objetivos compartidos por las mujeres en la educación
Una educación equitativa y de calidad para todos, que fomente el pensamiento crítico, debe insertarse en una lucha más amplia por la justicia social. Este ha sido el mensaje central de Mary Metcalfe, Directora del Comité Asesor sobre Educación de la fundación Open Society, durante su discurso en el segundo día de la 2ª Conferencia Mundial de la Mujer que se celebra del 7 al 9 de abril en Dublín,Irlanda.
La conferencia, cuyo tema es “Las mujeres en los sindicatos y en la educación, de las palabras a la acción”, acoge a unas 400 delegadas y delegados sindicales de todo el mundo. También ha contado con la presencia de Mike Jennings, Secretario General del Sindicato Irlandés de Profesores Universitarios (IFUT, por sus siglas en inglés), y Martin Rømer, Director europeo del Comité Sindical Europeo de la Educación (CSEE).
El contexto: una consideración crítica
No todas las luchas de las mujeres son iguales, ha señalado Metcalfe, en una reflexión personal sobre la educación y los momentos que marcaron su forma de pensar y su activismo. El hecho de que algunas mujeres puedan acceder a derechos que otras asumen como universales depende de cuestiones como “la juventud, el idioma y el tiempo. La etnia, la clase social, y el estatus: son factores que, conjuntamente, determinan las distintas situaciones en las que se puede encontrar cada mujer”, dijo.
Comprender estos contextos diferentes en los que se encuentran las personas tiene consecuencias a la hora de definir la estrategia, los mecanismos, y las posibilidades, ha afirmado, añadiendo que la educación puede ser un agente determinante para el cambio social.
Este cambio, así como las metas de la IE, sólo se pueden lograr “si movilizamos a la sociedad civil y a los gobiernos para que los apoyen”, ha sostenido Metcalfe, añadiendo que cuestiones como la discriminación contra los niños en la educación son problemas cada vez más importantes, que deberían tratarse junto con el impacto de la pobreza sobre la paridad en el acceso a los sistemas y resultados educativos.
La igualdad: una tarea compartida
En su saludo a los delegados y delegadas europeos, Martin Rømer, director europeo del CSEE, subrayó las disparidades que existen en un continente en el que las mujeres ocupan más trabajos a tiempo parcial que los hombres, en el que las mujeres son mayoritarias en la profesión docente, pero no en la afiliación ni en el liderazgo sindical, y en el que las mujeres reciben salarios menores que los hombres, pero representan casi el 60 por ciento de todos los diplomados universitarios.
Ha asegurado que “tenemos que fomentar una nueva actitud hacia la igualdad de género como una tarea compartida entre mujeres y hombres, y proseguir en la adopción de políticas sindicales sobre igualdad de género”, junto con la formación de los profesores y de los sindicalistas en materia de igualdad.
Que lograr la equidad de género es una tarea compartida también ha sido subrayado por el irlandés Mike Jennings. “Esta es una lucha común, es la lucha de todas las personas progresistas”, ha dicho, añadiendo que no puede existir la emancipación (ni para los hombres ni para las mujeres) cuando la mitad de la población está discriminada en base a su infancia, su vida adulta, su educación, su imagen y sus circunstancias económicas.
Luchar contra la complacencia
Durante el segundo panel plenario sobre Educación Equitativa para un Mundo Equitativo, auspiciado por Monique Foulhoux, presidenta de la Campaña Global por la Educación (CGE), los participantes trataron las herramientas y mecanismos necesarios para progresar contra la desigualdad de género en la educación.
Las personas del mundo de la educación deben asumir su responsabilidad frente a la creación de estereotipos de género, ha afirmado la interviniente Marina Milenkovic, Presidenta del Comité de Género del Sindicato de Profesores de Serbia (TUS). “Los estereotipos de género están imbricados en nuestra sociedad, y los y las docentes deben promover la igualdad de género en las escuelas. De aquí se sigue que debemos formar a los docentes en temas de igualdad de género”. Las perspectivas de género deben estar incluidas en los materiales educativos y deben ser adoptadas por padres, alumnos, autoridades municipales y docentes.
En el mismo panel de debate se encontraban Eva-Lis Sirén, Vicepresidente de la IE y Presidenta del sindicato sueco Lärarförbundet, y Loretta Johnson, Tesorera de la Federación Americana de Profesores (AFT, por sus siglas en inglés). La pobreza es un tema de gran importancia en los colegios americanos, ha afirmado Johnson, personal de apoyo escolar y coordinadora de voluntarios en su escuela infantil en Baltimore, Maryland, a comienzos de su actividad sindical. “Hay niños en la escuela procedentes de familias sin hogar, y sin alimentos, y sin embargo se ataca a la educación pública”, dijo, incidiendo en la descripción de las luchas en la educación pública y en el acceso a la educación a los que se ha aludido en la conferencia.
Debe dárseles más visibilidad a las cuestiones de género, dijo Sirén. “Tenemos que ponernos unas gafas de género que nos permitan ver mejor, y aplicar esta visón a nuestras propias organizaciones, sin dar nada por supuesto. Tenemos que seguir luchando.”
Parte de esta lucha tiene lugar en torno al salario. En Europa las mujeres siguen ganando un 16 por ciento menos que los hombres de media por cada hora trabajada. “En Suecia, la profesión docente es mayoritariamente femenina, y los salarios son menores que en otras profesiones mayoritariamente masculinas. Esto es un reto para nosotras”, dijo.
Para más información sobre la 2ª Conferencia Mundial de la Mujer de la IE pueden hacer clic aquí: http://pages.ei-ie.org/women2014/index.php?lang=en o seguir el hashtag de la conferencia en twitter: #EIWomen2014