Siria: Conmoción internacional por la muerte de 30 niños/as en un atentado con bomba contra una escuela
La IE ha recibido consternada la noticia de que al menos 30 niños/as sirios/as han fallecido en un doble atentado suicida en una escuela en la ciudad de Homs, controlada por el gobierno.
Los jóvenes estudiantes, que tenían entre seis y nueve años, formaban parte de las 39 personas que fallecieron en el ataque en el barrio de Akrameh, según datos facilitados por el Director del Observatorio Sirio de Derechos Humanos, Rami Abdel Rahman.
Ningún grupo ha reivindicado inmediatamente la autoría del atentado, pero la sección de Al-Qaeda en Siria, el Frente Al-Nusra, reivindicó la autoría de otro atentado con bomba similar en la ciudad que mató al menos a 12 personas en mayo.
El gobernador de Homs, Talal al-Barazi, también informó acerca de los atentados mortales, citando un total de 31 muertos y 74 heridos.
Número de muertes más elevado entre los/las niños/as
El número de muertes de niños/as es uno de los más elevados en atentados suicidas en siria desde que empezó el conflicto en el país hace tres años.
El distrito de Akrameh en Homs ha sido el objetivo de ataques más de una vez anteriormente, incluido el 19 de junio de 2014, cuando por lo menos seis personas murieron en un atentado con coche bomba.
Homs fue denominada en el pasado “la capital de la revolución” contra el Presidente Bashar al-Assad. La mayoría de la ciudad ha vuelto a estar controlada por el régimen después de dos años de bombardeos y asedio.
IE: Las escuelas deben ser entornos seguros
“Estamos muy tristes de recibir esta noticia terrible y transmitimos nuestro más sincero pésame a los familiares de las víctimas de este atentado”, dijo el Secretario General de la IE, Fred van Leeuwen. “La educación se reconoce como un derecho fundamental, independientemente de las circunstancias, y por lo tanto se debe hacer todo lo posible para proteger las escuelas y el derecho de los/las niños/as a la educación”.
La IE insta a los gobiernos, tanto en Siria como en todo el mundo, a garantizar que las escuelas y los lugares de enseñanza y aprendizaje sean entornos seguros en todo momento, incluso durante conflictos armados.
