Desnudar a un santo para vestir a otro: una decisión del gobierno suizo que tiene en armas a un sindicato de docentes
Se avecinan curvas en el enfrentamiento entre un sindicato suizo de docentes y el gobierno, que ha decidido dedicar fondos reservados a la educación para construir nuevas infraestructuras de transporte.
Los sindicatos docentes rechazan enérgicamente la iniciativa del gobierno suizo conocida como la “vaca lechera” porque implicará más recortes en los gastos destinados a educación y escuelas públicas.
La iniciativa, llamada oficialmente “para una financiación equitativa del transporte”, pretende que el impuesto sobre los carburantes se dedique exclusivamente a la construcción de carreteras y otros proyectos relativos al tráfico rodado, a expensas de otras responsabilidades del gobierno, como la educación. El Tesoro Federal tendría que lidiar con una pérdida de unos 1500 millones de CHF (francos suizos; unos 1360 millones de euros) al año. Según el Ministerio de Finanzas, la educación y la investigación perdieron ya unos 350 millones de CHF (unos 318 millones de euros), además de las medidas de austeridad acordadas por la Confederación y los cantones (regiones). Será preciso que los cantones recorten otros 125 millones de CHF (unos 114 millones de euros) más.
“Cemento en lugar de educación. ¡No puede ser!”, afirma el Presidente del sindicato Dachverband Lehrerinnen und Lehrer Schweiz (LCH), Beat W. Zemp.
Un golpe para la educación
Según el Ministerio de Finanzas, la educación y la investigación serán las más afectadas por la disminución de fondos. Si el Estado federal reduce su compromiso, por ejemplo en formación vocacional (que representa alrededor del 25 % de la financiación pública), los cantones y los municipios tendrán que involucrarse (lo cual tendrá graves consecuencias para las escuelas públicas). Los cantones dejarían de disponer de un total de 190 millones de CHF (alrededor de 173 millones de euros) al año, de los cuales 125 millones de CHF los perderían educación e investigación.
“Arruinar nuestra educación”
Para LCH, este nuevo recorte en el gasto dirigido a la educación no es manejable ni aceptable. “A la decisión de los cantones de disminuir en 1000 millones de CHF (alrededor de 909 millones de euros) la inversión en escuelas y educación para los años de 2013 a 2018, se añade un recorte adicional de 475 millones de CHF (unos 432 millones de euros) debido a la iniciativa de la “vaca lechera”. Así arruinamos nuestra educación de calidad y ponemos en peligro el futuro de Suiza”, comenta Zemp.
La mejor forma de financiar la construcción de carreteras es el fondo nacional de carreteras y transporte urbano
La LCH no está sola en su rechazo a la iniciativa de la “vaca lechera”, la apoyan 26 gobiernos de cantones, además de una amplia alianza de parlamentarios federales. Argumentan que la construcción, operación y mantenimiento de las carreteras ya cuenta con una financiación adecuada, a través del Fondo Nacional de Transporte Urbano y por Carretera aprobado por el Senado. Esta, dicen, es la mejor opción para financiar la infraestructura de los transportes. LCH insta a la ciudadanía a rechazar esta iniciativa en el referéndum que tendrá lugar el 5 de junio. El 26 de abril, Zemp participará en Berna en una mesa redonda, moderada por el senador federal Ueli Maurer, que explicará las razones del NO de la cámara baja federal a esta iniciativa.