Preocupación por el bienestar de las niñas: un informe revela las crecientes diferencias de género en las experiencias infantiles.
Tres nuevos informes en el Reino Unido revelan que el número de niñas que afirman sentirse infelices está aumentando a un ritmo alarmante. Un aumento en gran medida relacionado con el acoso y problemas con su apariencia física.
En lugar de esperar felizmente el inicio del nuevo curso escolar, cada vez más niñas padecen estrés, según el The Good Childhood Report, un estudio elaborado por la Children’s Society y la Universidad de Nueva York.
El informe revela que el número de niñas entre 10 y 15 años que expresan infelicidad ha pasado del 11 % al 14 % a lo largo de cinco años. El porcentaje de niños infelices en ese mismo periodo, se mantiene en el 11 %.
Estas cifras son más descarnadas cuando las examinamos con lupa: cuando los investigadores preguntan sobre cuestiones concretas, como la apariencia, el 34 % de las niñas expresan infelicidad, frente al 20 % de los niños.
Los investigadores dicen que las niñas tienen más probabilidades de ser blanco de acoso emocional y de insultos, que les ocurren a un ritmo dos veces superior al acoso físico de los niños. El informe sugiere, además, que las niñas dedican más tiempo a las redes sociales, donde se producen la mayor parte de los acosos.
El segundo informe, publicado por la británica Professional Association for Childcare and Early Years (Pacey), revela que, con apenas tres años, ya empiezan a experimentar infelicidad debido a su apariencia física.
Casi la tercera parte del personal de guarderías y colegios entrevistados afirma que han escuchado a algún niño referirse a sí mismo como gordo y el 10% ha oído algún niño decir que se siente feo.
Estos dos estudios aparecen tras la publicación de un estudio elaborado por el gobierno sobre este tema que revela que, a los 14 años, una de cada tres adolescentes sufre “angustia psicológica”.
