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El Día Mundial de los Docentes de 2006, la Internacional de la Educación presentó un informe capital al Comité de Expertos de la OIT/UNESCO (CEART), que supervisa la aplicación de la Recomendación de 1966 sobre la situación del personal docente y la Recomendación de 1997 sobre la situación del personal de la enseñanza superior.

Al adoptar estas Recomendaciones, los gobiernos reconocieron unánimemente la importancia fundamental de contar con docentes altamente cualificados y competentes que estén bien preparados para impartir la enseñanza a la generación siguiente. En el 40º aniversario del primer documento fundamental, el informe de la IE observa que se han hecho progresos significativos: reformas constantes de los sistemas educativos en todo el mundo y se ha implantado la educación pública generalizada en la mayoría de los países.

Sin embargo, pese a que los gobiernos afirman apoyar los valores y principios que figuran en las Recomendaciones, muchos no muestran respeto alguno por los derechos que éstas consagran, ni tampoco aplican políticas que las pongan en práctica.

En algunos lugares del mundo, los docentes están bien remunerados y se respetan su profesionalismo. Pueden contar con aulas en condiciones razonables, materiales didácticos adecuados y el apoyo de los gobiernos comprometidos en dar educación a sus ciudadanos. Lamentablemente, estos afortunados son pocos.

La gran mayoría de los docentes del mundo entero todavía luchan por hacer lo mejor que está a su alcance por los alumnos/as a pesar de la formación inadecuada, los salarios miserables, el tamaño imposible de las clases, la escasez de los materiales más elementales, la falta de financiación del gobierno para la educación, o inclusive la represión oficial de los docentes y de sus sindicatos.

El informe de la IE a la reunión trienal del CEART condena el hecho de que en todos los ámbitos importantes abordados, se pasan por alto los elementos fundamentales de las recomendaciones. El informe trata ocho temas importantes:

Escasez de docentes Se avizora una escasez importante de docentes, con un número creciente de docentes que van a jubilarse y pocos candidatos cualificados para la profesión. Lamentablemente la mayoría de los gobiernos están aplicando estrategias que solamente socavan la calidad de la educación: la intensificación de la carga de trabajo de los docentes en los países desarrollados y la contratación de personal no cualificado en los países en desarrollo. La IE pide a los gobiernos que inviertan en mejorar significativamente las condiciones de vida y de trabajo de los docentes para facilitar un mayor número de contrataciones y conservar esos docentes en el futuro.

La remuneración de los docentes Los bajos salarios de los docentes son lo que origina la escasez. El informe demuestra la actual deterioración a largo plazo del poder adquisitivo de los docentes. La IE pide un adecuado nivel de remuneración para el cuerpo docente, restaurando así el elevado prestigio social de la profesión docente como garantía a largo plazo de la cohesión, el progreso y la estabilidad sociales.

Consulta con las organizaciones de los docentes Las dos Recomendaciones piden con toda claridad que los gobiernos reconozcan los sindicatos y las organizaciones representativas de los docentes como socios en el diseño de las políticas. Lamentablemente, los países muestran cómo violan extensamente esta disposición. Sin la plena cooperación y participación de los profesionales de la enseñanza, ninguna reforma educativa puede tener éxito. La IE pide a los gobiernos que entablen un diálogo social con los docentes y sus sindicatos para construir sistemas de educación pública más fuertes.

Libertad académica y titularidad para los docentes La libertad académica y la titularidad para los docentes son de crucial importancia para los sistemas educativos libres de influencias políticas, económicas, ideológicas o religiosas. Recientemente, los docentes experimentan un control más centralizado del plan de estudios y la pedagogía, así como interferencia en los asuntos educativos por parte de las autoridades públicas, los medios de comunicación y la iglesia. La globalización, la mercantilización y las fuerzas del mercado aumentan estas presiones sobre los estudios y la investigación académica libre.

Gobernanza colegial Aun cuando se reconoce la capital importancia de la toma de decisiones colectiva y solía garantizarse la participación del cuerpo docente en los órganos de gobierno, hoy día, sin embargo, se excluye al personal académico de los órganos rectores de los centros de enseñanza superior hasta un punto sin precedentes. La IE se opone enérgicamente a la tendencia hacia una gestión unilateral de los centros de enseñanza superior y aboga en favor de una gobernanza colegial en forma de claustro.

Entornos escolares seguros y la violencia contra los docentes Las condiciones de vida y trabajo de los docentes se ven amenazadas por el fenómeno cada vez mayor de la violencia en las escuelas, un reflejo de los cambios más importantes que experimenta la sociedad a gran escala. Para que los docentes sean protegidos en su lugar de trabajo, deben establecerse sistemas de seguridad eficaces. Sin embargo, esta posibilidad sigue siendo un sueño para la mayoría de los docentes. La IE aboga por un trabajo constante con los padres y las comunidades a favor de una cultura de cooperación y tolerancia en las escuelas.

Centros y escuelas privadas La IE está particularmente preocupada por la proliferación de centros de enseñanza privados a expensas de las escuelas y universidades públicas. La educación es un bien público y un servicio a los ciudadanos. No es una mercancía que se compra y se vende, y no debe privatizarse por motivos de lucro. La IE pide a las autoridades públicas asumir su responsabilidad de dar acceso a la educación para todos, no solamente a una elite reducida.

VIH y SIDA La pandemia del VIH y el SIDA plantea uno de los retos más importantes de la historia a las comunidades médica y educativa, y de hecho a las sociedades del mundo entero. El extraordinario alcance del problema y la carencia de capacidad para resolverlo es una de las preocupaciones capitales para los docentes, particularmente en Africa subsahariana. La propagación de la pandemia socava enormemente los esfuerzos por lograr la Educación para Todos, uno de los Objetivos de Desarrollo del Milenio. La IE pide que se ponga fin a la discriminación contra los profesionales afectados por el VIH y está preocupada por la cuestión de género, ya que la mayoría de las personas afectadas en el mundo entero son mujeres.

Conclusión Pese a las numerosas dificultades que enfrentan los educadores alrededor del planeta, la IE no desea perder de vista los notables progresos realizados en la educación pública en el curso de las últimas cuatro décadas. Las Recomendaciones de 1966 y 1997 siguen siendo ideales inconclusos, pero no cabe duda alguna de que bien merecen luchar por ellos. La IE está convencida de que las Recomendaciones deben aplicarse universalmente, porque solamente entonces todos los niños y niñas tendrán la oportunidad de aprender, de crecer y de contribuir plenamente con todas sus potencialidades.

El informe complete, disponible en inglés se encuentra aquí.