¿Ha empezado ya la recuperación económica?
En todo el mundo la gente está buscando indicios de que lo peor de la crisis financiera ya ha pasado y de que puede haber empezado la recuperación económica. Los líderes de los Estados Unidos han afirmado recientemente que se podría entrever un "rayo de esperanza". Los medios de comunicación financieros se preguntan si la caída en picado de los mercados “ha tocado fondo”. En los círculos de la OCDE y del FMI, el ultimo término que está de moda es “green shoots” que significa "brotes verdes", como los primeros signos de vida después de que el fuego haya devastado un paisaje. Pero cabe preguntarse lo realista que es hablar, en estos precisos momentos, de “brotes verdes” económicos.
Por desgracia, tres informes presentados recientemente no dejan margen al optimismo. Dichos informes son de la OCDE, del FMI y de la ONU. Las tres instituciones internacionales han presentado estimaciones sobre las perspectivas de la economía mundial en el 2009 y más adelante. Las estimaciones varían un tanto, pero el contenido general es el mismo: se espera que la economía mundial siga retrocediendo ulteriormente.
El 27 de mayo, la ONU publicó una actualización del informe periódico de la ONU sobre la Situación y perspectivas para la economía mundial. Se espera que la economía mundial decrezca en un 2,6 por ciento en 2009. Esta desaceleración viene después de una expansión de la economía mundial de 2,1 por ciento en 2008 y de casi un 4 por ciento anual durante el periodo 2004-2007.
Los países en desarrollo se ven golpeados por esta crisis de manera particularmente importante. Con un incremento de su impacto, tanto en su alcance como en su intensidad en todo el mundo, la crisis es una amenaza considerable para la economía mundial y el desarrollo social, incluido el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Es poco probable que se produzca una pronta recuperación
Mientras que para 2010 es posible que se registre una leve recuperación, el informe afirma que una recesión mundial más prolongada también es posible si no se rompe el círculo vicioso entre inestabilidad financiera y declive de la economía real.
Los países en desarrollo son los más afectados por la crisis
La crisis se originó en los países desarrollados, pero se hace ahora patente que los países en desarrollo son los que se están viendo afectados con una virulencia desproporcionada a través de las inversiones de capital, del incremento de los costes de los préstamos, del colapso del comercio mundial y del precio de las mercancías, y por la disminución del envío de dinero. El declive del comercio mundial desde finales de 2008 ha sido dramático, cayendo en una tasa anual de más del 40% en los últimos tres meses. La crisis también se está cebando particularmente con los trabajadores inmigrantes.
Después de un prolongado periodo de rápido crecimiento, la caída más espectacular del comercio internacional puede observarse entre las economías asiáticas. Sólo en China, 20 millones de trabajadores han sido despedidos a finales de 2008.
Las economías de África, Latinoamérica y el Caribe están siendo incluso más golpeadas por la crisis. En 2009, se espera que el crecimiento del PIB en África se ralentice a 0,9 por ciento, bajando del 4,9 registrado en 2008. Se espera que las economías de América del Sur decrezcan al menos una media de 1 por ciento en 2009, mientras se prevé que las economías de México y Centroamérica caigan en más de un 4 por ciento.
El informe de la ONU estima que entre 73 y 103 millones más de personas serán pobres. “La mayor parte de esta caída económica se sentirá en Asia Oriental y Meridional: es probable que entre 56 y 80 millones de personas se vean afectadas, de éstas casi la mitad en la India. La crisis puede hacer que de 12 a16 millones más de personas vivan en la pobreza en África y otros 4 millones en Latinoamérica y en el Caribe", señala el informe.
El desempleo seguirá creciendo
Desde 2008 se ha producido un rápido aumento del desempleo y se espera que la situación empeore en 2009-2010. Los pronósticos iniciales de 50 millones de desempleados en los próximos dos años podría fácilmente duplicarse si la situación sigue deteriorándose. “Las lecciones extraídas de pasadas crisis financieras indican que por regla general son necesarios entre cuatro y cinco años para que las tasas de desempleo vuelvan a los niveles previos a la crisis después de que se haya afianzado la recuperación económica", afirma el informe.
Los beneficios de una respuesta coordinada en todo el mundo
El informe aplaude la respuesta política mundial. Pero prevé que la crisis, si va mucho más lejos, tenga consecuencias profundas en la seguridad y estabilidad mundial. El informe afirma que la liquidez adicional que acordó el G20, aunque importante, sigue siendo insuficiente para proporcionar a los países en desarrollo los recursos que necesitan para hacer frente a sus necesidades de desarrollo.
Al igual que el FMI, la investigación económica de la ONU sugiere que un estímulo económico mundial más equilibrado y coordinado tendría un mayor impacto en el crecimiento en todo el mundo. Por el momento, sólo se emprenden medidas de estímulo económico no coordinadas y llevadas a cabo individualmente por los gobiernos nacionales. De esta forma, dichas medidas de estímulo resultan desequilibradas, con un 80 por ciento concentrado en los países industrializados, mientras que la mayoría de los países en desarrollo carecen de la capacidad fiscal para actuar. Se necesita invertir $500 mil millones en financiación adicional para los países en desarrollo.
La OCDE y el FMI
A finales de marzo, la OCDE pronosticó un descenso en el PIB del 4,3 por ciento en los 30 países miembros. En estas naciones industrializadas se prevé que la tasa de desempleo se incremente en 8,4 por ciento en 2009 y 9,9 por ciento en 2010. La OCDE hace la misma observación que la ONU y la OIT: el desempleo seguirá aumentando durante algún tiempo, incluso después de que empiece a producirse la recuperación económica.
Las últimas estimaciones del FMI, presentadas en abril, eran un poco más optimistas que las de la OCDE y la ONU, y predecían una caída del 3,5 por ciento en el PIB de las economías desarrolladas en 2009, y una caída mundial del 1,5 por ciento en 2009. Cabe destacar una presentación durante la reunión del Grupo de política económica de TUAC, reunido esta semana en París, que muestra como el FMI ha seguido revisando sus estimaciones a la baja desde octubre de 2008.
Los “brotes verdes” de la recuperación económica
Todos estos informes plantean serias dudas sobre la idea de los “brotes verdes”, que se basa más en deseos que en evidencias.
El impacto en la educación
Como se ha señalado anteriormente, el impacto negativo de la crisis económica en el empleo sigue después del inicio de la recuperación. Lo mismo ocurre con el impacto sobre los presupuestos del sector público, y por lo tanto con el impacto en la financiación para la educación. En conclusión, no estamos seguros de que ningún “brote verde” de recuperación sobreviva y crezca. Si lo consigue, tendremos varios años de lucha por delante para mantener, e intentar desarrollar, la inversión en las personas a través de la educación.