Resolución sobre la educación en la diversidad cultural
El IVº Congreso Mundial de la Internacional de la Educación reunido en Porto Alegre (Brazil) del 22 al 26 de julio de 2004 :
1. Afirma que los derechos culturales son derechos humanos fundamentales;
2. Constata el desequilibrio existente en el flujo de bienes y servicios culturales entre distintas naciones a escala internacional y encuentra preocupante el que las fuerzas de la globalización y la liberalización del comercio estén planteando por distintos medios nuevas amenazas para la preservación y el desarrollo de las culturas;
3. Confirma la importancia de preservar las lenguas como reservas del pensamiento, la historia y el conocimiento, y reconoce la especial necesidad de preservar las culturas y la sabiduría tradicional de los pueblos indígenas;
4. Subraya que la educación a todos los niveles tiene un papel protagónico a la hora de promover la diversidad artística, lingüística y cultural en cada país y entre distintos países;
5. Subraya además que la capacidad de cada individuo para aprender, acceder a y participar en su propia cultura constituye la base para sustentar y promover la diversidad cultural;
6. Reconoce que enseñando el respeto a la diversidad de las culturas de la humanidad, los/as educadores/as pueden promover entre todos los pueblos del mundo la tolerancia, el diálogo y la cooperación, que representan la mejor garantía para la paz;
7. Reafirma la Declaración Universal de la UNESCO sobre la Diversidad Cultural de noviembre de 2001 y la Declaración del Consejo de Europa sobre la Diversidad Cultural de diciembre de 2000.
8. Reconoce el papel privilegiado que tienen los/as docentes en todo el mundo para la promoción de la igualdad, la diversidad y la no discriminación entre las distintas culturas que conviven en nuestros continentes;
9. Subraya que la diversidad cultural constituye para muchos un pilar del desarrollo sostenible, en la misma medida que la sociedad, la economía y el medio ambiente;
El Cuarto Congreso Mundial:
10. Insta a los gobiernos a poner en práctica la Declaración Universal de la UNESCO sobre la Diversidad Cultural de noviembre de 2001, así como su Plan de Acción.
11. Invita a las organizaciones miembros de la IE a: a. Alentar a los gobiernos y sistemas educativos a que incorporen en sus currículos, cuando resulte apropiado, el saber y la pedagogía tradicionales, y en particular los de los pueblos indígenas y grupos minoritarios;
b. Promover la educación y formación adecuada de los/as docentes con una perspectiva de diversidad cultural, a fomentar, en la medida de lo posible, la diversidad lingüística en todos los niveles de la educación, y a promover el multilingüismo con objeto de salvaguardar la herencia lingüística de la humanidad.
c. Reivindicar que la educación en la diversidad cultural y con el pleno respeto de los géneros, razas, culturas tradicionales y las creencias religiosas, se integre en la formación del personal docente y en los programas de estudios de los/as alumnos/as.
El papel de la IE
12. La IE debería: a. Mantener las discusiones necesarias con la UNESCO y otros organismos relevantes, con miras a aplicar políticas y programas que ayuden a los países en desarrollo y en transición a establecer la infraestructura educativa y de comunicaciones necesaria para que puedan florecer diversas expresiones culturales;
b. Apoyar los esfuerzos de la UNESCO para el desarrollo de un instrumento legalmente vinculante que garantice la preservación de la diversidad cultural frente a los retos sin precedentes que plantean la globalización de la economía, los rápidos cambios tecnológicos y el creciente desequilibrio en la expresión cultural a nivel internacional;
c. Tomar todas las medidas necesarias en las actuales negociaciones del AGCS, o en cualquier otra negociación que pueda iniciarse sobre comercio e inversiones, para asegurar que las políticas destinadas a preservar la diversidad cultural no se vean amenazadas a causa de las normas comerciales.