Una acción sindical para combatir las políticas neoliberales en la educación
Resolución del 7º Congreso Mundial
El 7º Congreso Mundial de la Internacional de la Educación
1. Reafirma el compromiso de la IE a promover la educación como un derecho fundamental y un bien público para todos y todas, y a instar a los Gobiernos para que cumplan con su responsabilidad de aportar una educación pública gratuita y de calidad.
2. Constata con gran inquietud el preocupante proceso que puede observarse no sólo en Europa sino también en otras partes del mundo, hacia la expansión de políticas educativas neoliberales con el pretexto de hacer frente a la crisis económica. Los recortes presupuestarios han supuesto una reducción importante del gasto público. A ello se suma la privatización y comercialización de los servicios educativos, una tendencia mundial en rápido aumento.
3. Expresa serias preocupaciones por el papel cada vez mayor que están teniendo desde 2011 algunas instituciones internacionales como la OCDE, el FMI y el Banco Mundial, que influyen en las políticas implementadas por los Gobiernos nacionales en el sector educativo.
4. Constata que en la región europea, única en cuanto a sus instituciones y estructuras supra-nacionales, la Troika, que carece de toda legitimidad democrática, interfiere en la definición de las políticas educativas y en la planificación de reformas de las estructuras de enseñanza. Las medidas de austeridad que aún siguen promoviendo la mayoría de los Gobiernos de Europa del Sur, así como de Europa Central y Oriental, repercuten considerablemente en la calidad de la educación pública y en el acceso a la misma, minando las condiciones de trabajo, la remuneración y las pensiones de los docentes y del personal educativo.
5. Deplora las continuas presiones a que se ven sometidos, a nivel mundial, los presupuestos de la educación pública, que desembocan inevitablemente en una degradación del estatus de la profesión docente. Resulta inaceptable la promoción de valores como la competitividad y el “espíritu empresarial”. La valoración de los centros docentes y la evaluación de los docentes y estudiantes son a menudo utilizados por las autoridades de la educación como herramientas para reforzar el control sobre la profesión docente y los sistemas educativos, en particular a través del uso de programas de remuneración relacionada con el rendimiento. La educación no es una empresa comercial con la que se pueda mercantilizar con vistas a obtener beneficios económicos. Las escuelas del futuro no deberían aportar a los estudiantes un conocimiento fragmentado y una capacitación básica que apunte a un único objetivo: la transición de la escuela al mercado laboral. Tendrían que contribuir a la preparación de los ciudadanos del mañana.
6. Recordando la Resolución de la IE de 2011 respecto a la “Acción sindical contra las políticas neoliberales y los planes de austeridad en Europa” y la “Resolución sobre el impacto de las políticas neoliberales sobre la educación” adoptada por el CSEE en 2014, donde se solicitaba una acción coordinada y unida por parte de las organizaciones miembros a favor de una educación pública y gratuita para todos y todas, sin discriminación alguna.
Encomienda al Consejo Ejecutivo de la IE:
7. Desarrollar estrategias globales de respuesta para contrarrestar el impacto de las políticas neoliberales sobre educación.
8. Continuar trabajando con organizaciones internacionales activas en el campo de la educación, incluyendo la UNESCO, la OIT, la Agrupación Global Unions y la OCDE, entre otras.
9. Recopilar, publicar y distribuir datos y evidencia en relación con las condiciones de trabajo y los salarios de los docentes y el personal educativo incluyendo la remuneración por méritos y los programas de remuneración relacionada con el rendimiento. Estableciendo un equipo de tareas o un grupo de trabajo sobre las condiciones laborales y salariales, la IE podría aportar a sus organizaciones miembros un informe detallado, con vistas al desarrollo de estrategias coherentes encaminadas a mejorar la situación.