Declaración conjunta de solidaridad del Consejo Global Unions | Justicia para Lee Cheuk Yan y garantía de derechos fundamentales en Hong Kong
El Consejo Global Unions (CGU) —que representa a más de 200 millones de trabajadores a través de la Confederación Sindical Internacional (CSI), las Federaciones Sindicales Internacionales (FSI) y la Comisión Sindical Consultiva ante la OCDE (TUAC, por sus siglas en inglés)— condena sin paliativos la detención ilegal de líderes y activistas sindicales y defensores de la democracia por la policía de Hong Kong, los ataques contra la población trabajadora en Hong Kong y las propuestas para introducir una nueva Ley de Seguridad Nacional.
El 15 de junio de 2020, Lee Cheuk Yan, secretario general de la central sindical Hong Kong Confederation of Trade Unions(HKCTU), y otros 14 líderes y activistas prodemocracia comparecieron ante el tribunal, acusados de haber organizado y participado en 2019 en asambleas ilícitas para solicitar la retirada de la ley de extradición y para reclamar el sufragio universal. Cargos similares le fueron imputados a Lee el 28 de febrero de 2020, y el 11 de junio de 2020 por su destacado papel en la vigilia a la luz de las velas del 4 de junio.
El Comité de Derechos Humanos de la ONU ha instado reiteradamente al Gobierno de Hong Kong a revocar los requisitos de notificación previa de reuniones públicas y las excesivas restricciones establecidas en el marco del decreto de orden público en Hong Kong, por contravenir el artículo 21 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP).
Continuos ataques contra periodistas, así como el procesamiento y las claras amenazas por parte del Gobierno de Hong Kong hacia líderes sindicales, personal sanitario, docentes, trabajadores/as sociales y funcionarios/as por el ejercicio de sus tareas profesionales y sus derechos sindicales, contravienen el principio de la libertad sindical.
Nos oponemos a la Ley de Seguridad Nacional en Hong Kong, adoptada por el Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional el 30 de junio. El proceso legislativo careció por completo de transparencia y no respetó el derecho esencial del pueblo de Hong Kong a participar y ser consultado. La ley ha quedado incorporada en la Ley Básica de Hong Kong y debía entrar en vigor a partir del 1 de julio.
El CGU comparte la profunda inquietud generalizada en Hong Kong y entre la comunidad internacional respecto a la amplia definición de los delitos contenidos en la ley, así como su aplicación y la jurisdicción del aparato de seguridad nacional chino que se establecerá en Hong Kong. Esta legislación socava seriamente el principio de “un país, dos sistemas” y representa una tangible amenaza a los derechos y libertades fundamentales consagrados en el principio de la libertad sindical.
Recordamos que la OIT solicitó que dicha legislación cumpliese con el Convenio 87 de la OIT sobre libertad sindical. Tal como advirtiera la alta comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, el 19 de junio, este tipo de leyes nunca deben usarse para criminalizar conductas y expresiones protegidas por las leyes internacionales de derechos humanos.
El CGU apoya sin reservas el derecho de la central sindical independiente Hong Kong Confederation of Trade Unions(HKCTU) y del pueblo de Hong Kong a disfrutar del derecho a la libertad de expresión, la libertad de reunión y la libertad de asociación.
El CGU reclama por tanto:
- La retirada de todos los cargos que pesan contra Lee Cheuk Yan y otros líderes prodemocracia en Hong Kong.
- El cese de las restricciones a la libertad de expresión, de reunión, de asociación, al derecho a organizarse, y el uso abusivo de la legislación civil contra manifestantes pacíficos.
- El respeto de los derechos sindicales y otros derechos humanos por parte de las autoridades chinas y hongkonesas.
- El respeto a la autonomía de Hong Kong y la revocación de la Ley de Seguridad Nacional.
- La aplicación del sufragio universal en Hong Kong.
Manifestando su pleno apoyo a la declaración del CGU, el secretario general de la Internacional de la Educación, Davis Edwards, reiteró la solidaridad de la Internacional de la Educación y de sus organizaciones miembros con el sindicato de docentes Hong Kong Professional Teachers’ Union(HKPTU) y alabó “el valor y la perseverancia de sindicalistas, docentes y estudiantes en la defensa de la democracia y los derechos humanos”.
