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ACTUALIZACIÓN – 23 de abril de 2021 | En una resolución adoptada en su 57ª reunión, celebrada de forma virtual, el Consejo Ejecutivo de la Internacional de la Educación ha condenado el golpe de Estado en Myanmar, así como la negativa a aceptar los resultados de las elecciones, la violencia empleada contra manifestantes y huelguistas y la detención de líderes electos, sindicalistas y otras personas que se oponen al régimen. A través de este escrito, la IE pide que se respeten plenamente los derechos humanos y sindicales y que se vuelva a la senda de la democracia. También insta a la comunidad internacional a responder urgentemente con medidas contundentes para poner fin a la violencia y a la represión.

La resolución señala que al menos un centenar de docentes han sido detenidos. Los registros casa por casa han obligado a muchos de ellos, así como a un gran número de funcionarios, a vivir en la clandestinidad. Muchos miembros y dirigentes de la federación de docentes Myanmar Teachers' Federation y de otros sindicatos de la enseñanza básica y superior han sido detenidos por acusaciones falsas. El texto supone también una condena de la prolongada detención del Dr. Sean Turnell, asesor económico de Aung San Suu Kyi y miembro del sindicato de educación superior National Tertiary Education Union de Australia.

La resolución hace un llamamiento al Consejo de Seguridad de la ONU para que adopte medidas más firmes que incluyan en su punto de mira a los dirigentes militares, y pide a los Gobiernos nacionales que utilicen todos los medios disponibles para sancionar a los militares, en particular mediante presiones económicas. Además, insta a las organizaciones miembros de la Internacional de la Educación a intervenir ante sus Gobiernos y a contribuir al Fondo de Solidaridad con Myanmar de la Internacional de la Educación.

El 16 de abril se estableció en Myanmar un Gobierno de Unidad Nacional (National Unity Government, NUG), compuesto en su mayor parte por diputados y diputadas electos que cuentan con un mandato popular otorgado en las elecciones parlamentarias de noviembre. Sin embargo, estos representantes no han podido tomar posesión de sus cargos debido al golpe de Estado y al estado de emergencia. El secretario general de la IE, David Edwards, informó de una conversación mantenida con el ministro de Educación (y Sanidad) del NUG, el Dr. Zaw Wai Soe, en el transcurso de la cual hablaron de la función vital que desempeña la educación en la construcción y el mantenimiento de la democracia después de esta oscura etapa. En ese sentido, el ministro citó el libro publicado por la Internacional de la Educación en 2019, Sobre la educación y la democracia: 25 lecciones de la profesión docente.

Edwards agradeció a las organizaciones que ya han contribuido al Fondo de Solidaridad con Myanmar por su apoyo a los docentes birmanos, que han sido tan valientes en estos tiempos desesperados; subrayó la importancia vital de este proyecto, e hizo un llamamiento para que otros contribuyan también.

La resolución que condena el golpe militar en Myanmar y exige el respeto de las elecciones democráticas y los derechos humanos puede consultarse aquí.

Los docentes que protestan son constantemente acosados y amenazados con ser detenidos por las fuerzas armadas

Según los sindicatos de la educación birmanos, muchos docentes siguen comprometidos con la marcha a favor de la democracia, pero deben encontrar formas innovadoras de manifestarse mientras se enfrentan al aumento de la violencia. Los docentes en Myanmar suelen manifestarse con su pareo escolar y constituyen blancos fáciles para los francotiradores y pelotones del ejército que intentan arrestarlos. Los docentes sospechosos de apoyar al CDM son suspendidos de sus puestos docentes y expulsados ​​de las viviendas públicas que se les proporcionan a sus familias. “Nuestro principal objetivo es seguir con vida y continuar manifestándonos junto a nuestros estudiantes”.

“El movimiento docente no se está debilitando en su oposición a la junta. Nos aseguramos de ponernos en contacto con grupos de docentes, también con aquellos que han regresado a sus lugares de origen y encuentran problemas de conectividad. Nuestro principal objetivo es seguir con vida y continuar manifestándonos junto a nuestros estudiantes. Algunos docentes también han comenzado a organizarse para brindar una educación alternativa, independientemente de la educación impuesta por el ejército. La solidaridad internacional resulta esencial para dar visibilidad a la atroz violencia que se ejerce contra los ciudadanos de a pie. También necesitamos apoyo solidario para continuar la lucha a favor de la democracia y la educación gratuita”, afirma Tun, un líder sindical de la educación local, que logró hablar con la oficina regional de la Internacional de la Educación.

Fondo de Solidaridad para los Trabajadores de la Educación de Myanmar de la Internacional de la Educación

Como parte de un esfuerzo de Global Unions para conseguir apoyo financiero para los valientes trabajadores de Myanmar, la Internacional de la Educación está actualmente recolectando donaciones solidarias a fin de ayudar a los docentes y a los trabajadores de la educación en sus luchas diarias. Los sindicatos de la educación locales están poniendo en marcha un plan detallado que describe cómo se utilizará la solidaridad financiera internacional y cómo se puede destinar a los beneficiarios.

Así pues, la IE insta a sus organizaciones miembros y a los ciudadanos interesados de todo el mundo a que contribuyan al Fondo de Solidaridad para los Trabajadores de la Educación de Myanmar de la Internacional de la Educación enviando sus donaciones a:

Internacional de la Educación

ING Bank

24, Avenue Marnix

1000 Bruselas

IBAN: BE05 3101 0061 7075

Swift: BBRUBEBB

indicando "UAA Myanmar Solidarity Fund" en el concepto de la transferencia bancaria.

Asimismo, la Internacional de la Educación está activando procedimientos intergubernamentales para denunciar las violaciones de los derechos humanos y sindicales que afectan a docentes y estudiantes.

Una huelga general paraliza Myanmar

A pesar de que la junta militar ha intensificado su uso indebido de la fuerza contra los manifestantes y las manifestantes pacíficos, los trabajadores y las trabajadoras de Myanmar no van a dejar que el miedo y la violencia los silencie. Están decididos a continuar el movimiento pacífico de desobediencia civil contra la junta militar ilegal. En una declaración conjunta, las organizaciones sindicales de Myanmar han pedido a todos los trabajadores y las trabajadoras que se sumen a un paro laboral prolongado a nivel nacional para paralizar la economía del país. La intención es prolongar la huelga hasta que se restaure plenamente la democracia.Al menos 60 manifestantes han perdido la vida desde que el ejército tomó el poder, entre ellos docentes, como Daw Tin Nwe Yi, una profesora de enseñanza secundaria. Las Naciones Unidas han denunciado que cientos de manifestantes han resultado heridos y más de 1.700 han sido arrestados y detenidos arbitrariamente. La IE ha pedido la puesta en libertad inmediata de los docentes y las docentes de la Federación de Docentes de Myanmar que se encontraban entre las personas detenidas.

En un mensaje de vídeo publicado hoy, el Secretario General de la IE, David Edwards, reafirma el apoyo total de la IE al movimiento de desobediencia civil y a todos los trabajadores y las trabajadoras en huelga en Myanmar. Asimismo, pide la solidaridad de todas las organizaciones afiliadas a la IE con la Federación de Docentes de Myanmar y el pueblo de Myanmar. “Mostraremos a nuestros hermanos y hermanas que no están solos, que en medio de una pandemia mundial no nos hemos olvidado de quiénes somos y de los valores que defendemos: la democracia, los derechos humanos, la libertad y la solidaridad”, declaró.

Las organizaciones sindicales convocaron una huelga general el lunes 22 de febrero de 2021 para protestar contra el golpe militar. Exigen que se respeten los resultados de las elecciones celebradas en noviembre de 2020 y que se libere a todos los líderes políticos y activistas detenidos. Calculan que unos 12 millones de personas se sumaron a la huelga, que afectó a todos los sectores económicos. En las ciudades más importantes del país hubo manifestaciones multitudinarias. Esta es la reacción popular más significativa y con mayor seguimiento ante el golpe de estado del 1 de febrero.

El Consejo de Global Unions lanzó un vídeo de apoyo a la huelga general. Se trata de otro ejemplo del apoyo continuo por parte de la IE y otras federaciones sindicales mundiales a la lucha por la democracia que protagonizan trabajadores, sindicatos y sociedad civil en Myanmar desde el golpe de estado y que incluye acciones como la desobediencia civil, huelgas y protestas.

Ante esta huelga general, David Edwards, secretario general de la Internacional de la Educación, aplaudió la valiente resistencia de los trabajadores y las trabajadoras, los sindicatos y la ciudadanía en general con estas palabras: “El pueblo de Myanmar ha hablado. En pocas ocasiones ha existido una división tan evidente y visible entre gobernantes y gobernados. La IE y otras federaciones sindicales mundiales apoyamos al pueblo de Myanmar. Pedimos a los gobiernos que escuchen este llamamiento y tomen medidas para expulsar a los conspiradores ilegítimos que se han hecho con el poder, recuperar el control del parlamento y continuar en la senda de la democracia”.

" La Internacional de la Educación pidió a las Naciones Unidas y a los gobiernos que actuaran en apoyo de la democracia en Myanmar. La Internacional de la Educación también participó en la acción de protesta internacional del 11 de febrero organizada por la Agrupación Global Unions. El 10 de febrero, la Internacional de la Educación emitió un llamamiento de acción urgente - véase el modelo de carta de protesta - a las organizaciones afiliadas instándolas a participar en la solidaridad internacional y a ponerse en contacto con sus gobiernos nacionales en oposición al golpe y en apoyo de los manifestantes y de los detenidos en Myanmar, incluido el académico australiano Sean Turnell".

Puedes actuar:

Varios gobiernos y organizaciones internacionales ya han reaccionado ante estos hechos. Muchos se están replanteando sus relaciones con Myanmar y, en concreto, hay quienes van a imponer sanciones a los líderes militares y sus empresas.

Además, el día 22, cuando tuvo lugar la huelga general, el Consejo de la Unión Europea, en representación de los 27 países miembros de la UE, adoptó varias conclusiones sobre Myanmar. Piden “la desescalada de la crisis actual mediante el cese inmediato del estado de emergencia, la restitución del gobierno civil legítimo y la apertura del parlamento recientemente electo. Deben respetarse los resultados de las elecciones democráticas celebradas el 8 de noviembre de 2020. Los militares tienen que hacerse a un lado”.

Las conclusiones indican que estos países están dispuestos a “adoptar medidas restrictivas dirigidas a los responsables directos de estos actos”. También señalan que “la Unión Europea y sus estados miembros revisarán el resto de herramientas a su disposición”.

El 4 de febrero, el Consejo de Seguridad de la ONU exigió la “liberación inmediata de todos los detenidos” y destacó “la necesidad de defender las instituciones y procesos democráticos, evitar cualquier recurso a la violencia y respetar plenamente los derechos humanos, las libertades individuales fundamentales y el Estado de Derecho”.

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptó una postura aún más detallada el 12 de febrero. También pidió la puesta en libertad de todas las personas detenidas, la supresión del estado de emergencia y la “restauración del gobierno elegido democráticamente, aunque exigió más medidas”. El Relator Especial está llevando a cabo una labor continua y crucial sobre la situación de los derechos humanos en Myanmar. Dado el importante deterioro de los derechos humanos en el país, el Consejo solicitó “más asistencia y los recursos y expertos que precise para poder cumplir plenamente su mandato”.