Ei-iE

La Internacional de la Educación, junto con otras federaciones sindicales internacionales (FSI), se ha embarcado en un proyecto destinado a impulsar la renovación sindical y formar a jóvenes sindicalistas.

El proyecto "Intensificar las voces de la juventud sindical en la nueva normalidad tras la COVID-19" tendrá una duración de tres años y contará con el apoyo de la Internacional de la Educación y la Confederación Sindical Internacional (CSI), la Internacional de Servicios Públicos (ISP), la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (FIT), IndustriALL y la Internacional de Trabajadores de la Construcción y la Madera (ICM). Además, ha recibido ayuda financiera por parte de una fundación alemana, la Friedrich-Ebert-Stiftung(FES).

El claro impacto de la COVID-19 en la juventud trabajadora

Las FSI lamentan que, incluso antes de la pandemia de COVID-19, la fuerza laboral joven ya estuviera representada de forma desproporcionada en las formas de trabajo precarias/no permanentes, incluido el trabajo temporal, en agencias e informal. Estos tipos de trabajo se caracterizan por la privación de derechos y protecciones en el ámbito laboral, los salarios precarios, unas condiciones de trabajo deficientes y la falta de acceso o el acceso inadecuado a la protección social.

Las repercusiones sociales y económicas de la pandemia de COVID-19 no han hecho más que exacerbar la situación de la juventud trabajadora, y las mujeres jóvenes son un grupo particularmente afectado. Varios estudios recientes de ONU Mujeres muestran que la crisis sanitaria tiene un claro impacto de género. Mujeres de todo el mundo han perdido (y siguen perdiendo) ingresos a causa de los cierres. Por otro lado, el elevado porcentaje de trabajo doméstico y de cuidados no remunerados que las mujeres ya realizaban antes de la pandemia se ha visto incrementado exponencialmente.

Acciones de las FSI en favor de la juventud trabajadora

Las FSI ya están trabajando para unir a las juventudes trabajadoras de varios sectores, sindicatos y regiones. Su propósito es debatir y compartir preocupaciones e ideas en torno a los nuevos retos a los que se enfrenta la fuerza laboral joven en tiempos de pandemia. Las FSI se han posicionado de forma clara respecto a la defensa de salarios y condiciones de trabajo dignos para la juventud trabajadora y la mejora de su representación y participación activa en el movimiento sindical.

En julio de 2020, las FSI organizaron dos webinarios en torno al tema "Intensificar de las voces de la juventud", y en noviembre de 2020 se celebraron dos sesiones (piloto) de formación en línea. Las personas participantes se involucraron activamente en los debates de los dos webinarios y pidieron que se organizaran otros debates más amplios sobre temas relevantes.

La juventud trabajadora lleva años enfrentándose a retos concretos y la pandemia no ha hecho más que agravarlos. Ejemplos de ello son la alta tasa de desempleo juvenil, la precariedad y la inseguridad laboral, las nuevas formas de trabajo, el deterioro de las condiciones laborales y la discriminación y las desigualdades en el lugar de trabajo.

Partiendo de estos retos, el proyecto de las FSI se ha planteado los siguientes objetivos:

• reforzar el liderazgo de la juventud activista;
• ampliar los conocimientos de la juventud trabajadora y su capacidad para analizar cuestiones globales complejas que afectan a trabajadores y trabajadoras (jóvenes) en el mundo laboral y su capacidad para incluir dichas cuestiones en su trabajo sindical;
• incrementar la participación activa y la representación de la juventud trabajadora en los sindicatos;
• intensificar la solidaridad internacional entre la juventud trabajadora tanto en los diferentes sectores como entre ellos.

De hecho, el plan estratégico de la Internacional de la Educación para este periodo entre congresos (2019-2023) incluye la prioridad estratégica de garantizar que la juventud activista se comprometa de forma activa en todos los niveles y estructuras de sus organizaciones afiliadas.

Diversidad de actividades en el marco del programa FES/FSI

Para finales de 2023, un grupo de trabajo integrado por una serie de jóvenes sindicalistas se reunirá para debatir y determinar las cuestiones claves que afectan a la fuerza laboral joven de todos los sectores y toda su diversidad transversal, particularmente a la luz de la pandemia de COVID-19 y sus repercusiones en las formas de trabajo existentes y nuevas.

Además, el grupo de trabajo también presentará recomendaciones en las que se indicarán las principales oportunidades de acción por parte de las FSI.

También se espera que:

• las problemáticas y las preocupaciones de la juventud trabajadora se incluyan en las agendas sindicales a todos los niveles y en las campañas y las estructuras de toma de decisiones durante la pandemia de COVID-19 y tras ella.
• las preocupaciones e ideas de la juventud activista se tengan en cuenta en las respuestas del gobierno a corto, medio y largo plazo orientadas a abordar las crisis actuales en los ámbitos sanitario, social y económico a escala local, nacional, regional e internacional.

Con el fin de lograr los objetivos del proyecto se han planificado varias actividades:

• Un grupo de trabajo mundial centrado en la juventud trabajadora y las nuevas formas de trabajo, formado por 18 jóvenes sindicalistas de las afiliadas a las FSI participantes procedentes de todo el mundo. Después de los talleres periódicos, una de las acciones del grupo de trabajo será informar sobre las principales prioridades de las juventudes trabajadoras de todos los sectores. Asimismo, formulará recomendaciones sobre las modalidades, los mecanismos, el formato y/o los enfoques del diálogo intergeneracional e intersectorial en y entre los sindicatos a escala nacional, regional e internacional como una dimensión crítica de la (re)construcción de la renovación sindical en un mundo laboral afectado por la COVID-19.
• Una academia internacional dedicada a la juventud trabajadora en forma de módulos educativos virtuales y presenciales. Su función es capacitar a 20 jóvenes líderes y activistas sindicales para dar forma a una "nueva normalidad" basada en la justicia económica, social, climática, de género y racial.

Las FSI colaborarán con la Universidad Laboral Mundial en el desarrollo del plan de estudios y el programa de la academia. Las conclusiones y las recomendaciones del grupo de trabajo en torno a "la juventud trabajadora y las nuevas formas de trabajo" también se integrarán en el plan de estudios y el programa de la academia internacional.

El liderazgo joven es "vital" en un sindicato

Ruby Ana Bernado, integrante de la Alliance of Concerned Teachers de Filipinas, fue elegida para formar parte del grupo de trabajo. Su elección se basó en la experiencia que ha adquirido en los ámbitos de la sindicación, la defensa y la organización de campañas en favor de la juventud trabajadora en las nuevas formas de trabajo.

Según Bernado, "en general, los problemas de todo el personal docente filipino también los experimenta todo el profesorado joven, desde sentirse sobrecargado de trabajo, mal pagado y víctima de ataques hasta las dificultades relacionadas con la enseñanza a distancia". "Contar con docentes jóvenes entre los miembros de la dirección sindical también es importante", e igual importancia tiene que se escuchen sus voces y opiniones.

Por otro lado, destacó el beneficio que aporta conocer a líderes sindicales de distintos sectores y países, ya que a ella le permitió entender mejor que el liderazgo joven es "vital" en un sindicato.

Como miembro de un comité dedicado a las redes sociales, Bernado considera que "difundir lo que hacen los sindicatos de otros países es muy útil para que mis compañeros y compañeras jóvenes vean que no estamos solos y que el espíritu de solidaridad realmente existe. Puedo explicar cómo difundimos la información en las plataformas de medios sociales. Puedo organizar una campaña de afiliación entre la juventud y volcar en ellos todo lo que he aprendido en este programa".

Sus mayores expectativas están relacionadas con la solidaridad social y con el hecho de que las campañas sindicales sobre derechos humanos, derechos laborales y educación para todos y todas lleguen a la esfera internacional.

"La juventud es fundamental en los sindicatos por su naturaleza innata de ser fuertes, idealistas y entusiastas. Además, tenemos mucho tiempo y somos muy comprometidos", añadió Bernado. "También somos creativos a la hora de diseñar estrategias para las campañas. A escala global también estamos siendo testigos de la acción juvenil en favor de la justicia climática y la lucha por la democracia, y en muchos países, incluso Filipinas, han mejorado cuestiones relacionadas con la soberanía y los derechos humanos".

Dotar de conocimientos a la juventud sindical docente

Geneviève Ngo Djon, jefa del departamento de la Célula de la Juventud de la Fédération camerounaise des syndicats de l’Éducation (FECASE) de Camerún, considera que "existe una brecha creciente y sustancial en las condiciones de trabajo entre el personal educativo de las zonas rurales y las urbanas, especialmente entre el personal docente joven".

En su opinión, estos últimos son víctimas de la falta de una infraestructura educativa en las zonas remotas. "La mayoría no recibe ayuda directa, sino que son sus familias las que les apoyan. Además, tienen que tener otro empleo para llegar a fin de mes".

Por otro lado, lamentó que muchas veces, "cuando salimos de la facultad de magisterio nos aislamos. Es importante tener compañeros y compañeras más experimentados que nos guíen".

También destacó que la sindicalización no es automática y la sociedad general la percibe como algo negativo. "Que la sindicación deje de ser automática plantea un gran problema. La gente habla de corruptos en los sindicatos; el sindicalismo se asocia directamente con la oposición al gobierno y las autoridades públicas. Lo que piensa la gente tiene mucho peso e influye mucho en la decisión de afiliarse o no a un sindicato. La sociedad y el gobierno ejercen presión. Por eso, debería reimplantarse la sindicalización sistemática y dejar que los sindicatos encuentren la forma de movilizarse desde la base".

Otro problema al que se enfrentan, sobre todo el profesorado joven, es la falta de formación continua. "Por eso el proyecto de FES/FSI es tan importante. ¡Y no esperaba la calidad de la formación que recibimos!".

Al comentar a modo de ejemplo una sesión de formación sobre comunicación sindical, destacó que el personal docente de Camerún carece de ciertos conocimientos y precisamente el primer paso es contar con los conocimientos adecuados.

"En mi centro, la gente me mira con miedo por mi labor sindical y mi formación, pero vienen a verme por el trabajo bien hecho. A nivel profesional, adquirimos conocimientos en ámbitos como la gestión de conflictos. A nivel sindical, cuando volví de la sesión de formación del programa FES/FSI utilicé la herramienta de poder persuasivo que había aprendido y conseguimos hablar del sindicato con algunas personas que se unieron a nuestra causa".

Desde que participó en la formación, el Consejo Ejecutivo del sindicato ha encomendado a Ngo Djon la tarea de gestionar los contenidos del sitio web y la página de Facebook. Ahora quiere crear perfiles del sindicato en Instagram y TikTok e invertir en los medios sociales para movilizar a la juventud de las zonas rurales. Además, quiere organizar y moderar talleres de formación para explicar todo lo que ha aprendido durante la formación FES/FSI.

Afíliate a un sindicato, ten un amigo antes de necesitarlo

Al igual que Bernado y Ngo Djon, Anthony Kennedy, de la Jamaica Teachers’ Association (JTA) también tuvo la oportunidad de participar en la formación del proyecto FES/FSI.

"Muchos docentes jóvenes no llegan a ocupar puestos de liderazgo y no se les ofrece oportunidades de crecimiento", insistió. "Necesitamos un cambio de mentalidad y lo cierto es que ya está ocurriendo lentamente. No estamos aprovechando las capacidades del profesorado joven como deberíamos".

En la campaña para la presidencia de la JTA, Kennedy se dio cuenta de que "pensaban que era demasiado joven y tenía que esperar mi turno como otros jóvenes. Además, la gente no es consciente del trabajo del personal educativo ni de su contribución a la sociedad".

El mensaje que utilizó para su campaña fue: "Quiero revitalizar el sindicato, dotar de una nueva marca a la asociación, cambiar el significado de ser un sindicato".

Kennedy considera muy necesario hacer campaña sobre lo que es un sindicato porque el profesorado joven no se interesa por los sindicatos y la información no llega a la membresía de base.

Sin embargo, cree que hay oportunidades. "Tenemos un buen futuro por delante. Una de las claves es desarrollar estrategias organizativas. El personal docente joven debe tener una voz propia".

Una forma de que la juventud docente nos entienda, dijo Kennedy, es destacar que "con el camino que está tomando el gobierno, vas a necesitar un amigo. Ten un amigo antes de necesitarlo. Afíliate al sindicato para que cuando llegue el momento en que necesites a alguien a tu lado para afrontar lo que se nos viene, tengas a ese amigo".