Adaptarse a la Covid-19: eliminar la tierra de la educación indígena basada en la tierra
Suscríbase
Subscríbase al boletín de Mundos de la Educación.
Suscríbase
Subscríbase al boletín de Mundos de la Educación.
Gracias por subscribirse
Algo salió mal
La pandemia de COVID-19 planteó una serie de retos específicos a las comunidades indígenas del norte de Canadá. Para los programas de educación indígena basada en la tierra en particular, que requieren que el alumnado y el profesorado estén juntos en la tierra, el cambio hacia el aprendizaje en línea requirió respuestas únicas y creativas por parte de las comunidades indígenas y de los educadores y las educadoras que se basan en la tierra.
En el Centro Dechinta para la Investigación y el Aprendizaje [1], un centro de educación indígena basada en la tierra situado en los Territorios del Noroeste de Canadá, la pandemia supuso en un principio una amenaza para llevar a cabo nuestros programas, que están al servicio de varias comunidades Dene del norte. A medida que la pandemia se iba extendiendo, las personas mayores y las poseedoras de los conocimientos de los dene hicieron hincapié en el hecho de que volver a la tierra era una forma segura de autoaislarse de la COVID-19, lo cual también animaría a las familias a participar en prácticas culturales y a conectarse con la tierra y con lo que eran como pueblo indígena. Enraizado en su compromiso con la autodeterminación de los dene, el Centro Dechinta se negó a trasladar toda su programación a Internet y encontró soluciones híbridas que animaban a las familias y a la juventud dene a acceder a la tierra de forma segura.
También organizamos una serie de seminarios web en línea en 2020 y elaboramos un informe posterior [2] en 2021 para examinar los riesgos que conllevaba poner en línea la educación indígena basada en la tierra y ofrecer posibles soluciones, medidas de mitigación o alternativas que permitieran llevar a cabo el aprendizaje en grupo inmersivo durante la pandemia.
A lo largo de todo este proceso hemos aprendido que la educación de los dene basada en la tierra es posible durante una pandemia, pero no se puede impartir en línea ni adaptarse a los marcos institucionales “occidentales”. No es posible eliminar la tierra de la educación de los dene basada en la tierra porque es la propia tierra la que enseña. La tierra es, y seguirá siendo, el fundamento de la educación basada en la tierra y de la autodeterminación de los dene.
La educación indígena basada en la tierra en Canadá: resistencia colonial y reivindicación cultural
Los programas de educación indígena basada en la tierra son fundamentales para construir un futuro de autodeterminación indígena y revitalización cultural en Canadá. Para que estos programas tengan éxito, la tierra no es una opción, sino un requisito. La tierra siempre ha sido una fuente primaria de conocimiento y aprendizaje para las naciones indígenas, que alimenta las prácticas éticas, los sistemas políticos, la lengua y las visiones del mundo. A través de la violencia de la colonización y el asentamiento europeo, estos sistemas de conocimiento se vieron significativamente perturbados, ya que las comunidades y los niños y niñas indígenas fueron apartados de sus tierras y de sus relaciones comunitarias. La educación indígena basada en la tierra se esfuerza por contrarrestar este legado colonial opresivo con el fin de restaurar las formas indígenas de conocer, ser y hacer que están íntimamente conectadas con la tierra.
Un resumen de nuestra investigación (en colaboración con Alex Wilson) sobre la importancia de los programas basados en la tierra y dirigidos por indígenas que se llevan a cabo en Canadá ha revelado que estos programas suelen desarrollarse teniendo en cuenta los siguientes objetivos:
- mejorar los resultados académicos y profesionales del alumnado indígena y hacer frente a las tasas desproporcionadamente bajas de asistencia a la escuela secundaria y postsecundaria entre las y los jóvenes indígenas;
- mejorar las habilidades y la alfabetización relacionadas con la tierra del alumnado a través de las formas indígenas de conocer, ser y hacer;
- crear un plan de estudios culturalmente relevante para el alumnado indígena y proporcionarle espacios seguros en los que pueda aprender y practicar su cultura;
- crear opciones educativas alternativas para el alumnado indígena que no estén arraigadas en los sistemas de colonialismo;
- proporcionar un modelo de educación que promueva la autodeterminación de las naciones indígenas dándoles el control sobre sus propios sistemas educativos, y empoderar al alumnado para que llegue a convertirse en parte informada y activa dentro de sus comunidades.
La educación indígena basada en la tierra no es solamente otra forma de “educación al aire libre”, sino que es un componente fundamental para la construcción de la nación, el resurgimiento político y cultural, la descolonización y la lucha contra la violencia de género. También desempeña un papel importante tanto en la salud física como mental, ya que permite que el alumnado, los educadores y las educadoras, y las personas que forman parte de la comunidad se (re)conecten con las formas de conocimiento y de ser de los indígenas, integrándolas en sus propios programas educativos y dándoles las herramientas necesarias para que puedan cuidar de sí mismos, de sus comunidades y de su tierra utilizando la teoría y las prácticas indígenas.
La vuelta a la tierra: la COVID-19 y los riesgos de poner la educación de los dene en línea
Aunque las prácticas basadas en la tierra promueven la salud, la resistencia y la autodeterminación de las comunidades dene, la pandemia dificultó el funcionamiento de los programas educativos indígenas basados en la tierra que se desarrollaban en el norte. A diferencia de otras formas de educación, nuestra investigación reveló que los educadores y las educadoras indígenas del norte se enfrentaban a una serie de desafíos específicos en medio de la pandemia, en particular con respecto a la transición hacia el aprendizaje en línea. Entre ellos se encuentran la preocupación por el acceso a Internet y a la tecnología en las comunidades remotas y la posibilidad de que se exploten los conocimientos al impartirse la educación de los dene por Internet.
En particular, descubrimos que la enseñanza de las leyes, la ética y las formas de conocer/ser de los dene (e indígenas) debe ser una experiencia vivida en primera persona por el alumnado, ya que requiere que las personas que participan en ella tengan un contacto directo con la tierra, que se relacionen entre ellas, con sus instructores e instructoras y con sus mayores. Por ejemplo, las prácticas éticas asociadas a la ofrenda de tabaco y a la oración, a la caza de alces o caribúes, a la instalación de campamentos o a la captura de peces, solo pueden aprenderse en la tierra. Además, una de las partes más importantes de la educación inmersiva basada en la tierra es que el alumnado participe en la vida comunitaria. Las lecciones sobre el consentimiento, la reciprocidad, el cuidado y la conexión que se derivan de esta experiencia no pueden reproducirse de forma aislada o en línea.
En respuesta a estas preocupaciones, los líderes de los dene, las personas mayores, las comunidades y los programas basados en la tierra encontraron otras formas de llevar a cabo las prácticas basadas en la tierra y la educación de los dene del norte. Parte de nuestra investigación incluyó una entrevista a Doug Williams, anciano de las Primeras Naciones del Lago Curvo, quien nos recordó la importancia de situar la tierra y la tradición en el centro de nuestras respuestas a la COVID-19 en calidad de pueblos indígenas. Doug se hace eco de lo que muchos de los demás participantes en el seminario web destacaron: los pueblos indígenas deben encontrar formas alternativas de salir al exterior y practicar sus tradiciones, sin dejar de dar prioridad a su seguridad y su salud. El retorno a la tierra tendrá un aspecto diferente en estos tiempos, pero cuando se hace de forma segura y aislada, puede ser una fuente de curación y bienestar para las comunidades.
Dar prioridad a la educación de los dene durante una pandemia: apoyar el bienestar de la comunidad y la autodeterminación relacionada con la tierra
Dechinta dio respuesta a las necesidades urgentes de las comunidades de los dene durante la pandemia de COVID-19 adoptando nuevos enfoques para que las familias y la juventud pudieran salir a la tierra de forma segura. A partir del verano de 2020, modificamos nuestra programación con las Primeras Naciones Tu Lidlini Dena, Yellowknives Dene y Dehcho para apoyar la educación de los dene basada en la tierra con las siguientes medidas:
- Distribuyendo los recursos y materiales pedagógicos necesarios para fomentar el acceso seguro a la tierra, y proporcionando financiación y herramientas forestales a las familias y la juventud;
- Desarrollando la capacidad educativa y las habilidades de la juventud para articular las leyes de los dene relativas a las prácticas de recolección y a la relación con la tierra, lo que incluye una serie de vídeos de los Dehcho;
- Incrementando la cantidad y la diversidad de alimentos del campo disponibles para la comunidad en una época de escasez económica y alimentaria, pagando a los recolectores por la distribución de pescado, carne y medicinas;
- Produciendo recursos para el uso y el intercambio lingüístico multigeneracional;
- Produciendo vídeos instructivos que incorporan elementos clave de la filosofía, la ética y la lengua indígenas.
También esperábamos proporcionar herramientas teóricas y prácticas en línea a los educadores y educadoras, el alumnado y la comunidad para ayudarles a desenvolverse adecuadamente con respecto a la educación y a la práctica indígena basada en la tierra en la era de la COVID-19. En colaboración con Alex Wilson, trabajamos en un proyecto destinado a recopilar un documento de recursos y herramientas de enseñanza comprometida con la tierra compatibles con la prestación a distancia. Nuestra investigación a través del seminario web también puso de manifiesto varios enfoques alternativos y seguros a la educación indígena cuando el acceso a la tierra y a otras personas está limitado. El informe completo que recoge estas conclusiones está disponible en nuestro sitio web.
Tenemos claro que la sabiduría de la tierra, y el papel central que ocupa en la vida y la política de los dene, constituye la base de la educación basada en la tierra, y que los formatos de aprendizaje en línea no son capaces de sustituir esta modalidad de pedagogía. Mientras seguimos enfrentándonos a los retos de una pandemia global, avanzaremos en la búsqueda de formas creativas y alternativas para llevar a cabo nuestras prácticas basadas en la tierra, para estar en comunidad unos con otros y participar en ceremonias, para implicarnos en un aprendizaje que sea beneficioso para nuestro bienestar mental, físico y espiritual, y para encontrar formas de afirmar y practicar la autodeterminación de los dene.
__________
El Día Internacional de los Pueblos Indígenas se conmemora anualmente el 9 de agosto para sensibilizar sobre los derechos de los pueblos indígenas de todo el mundo. El tema de este año, El papel de las mujeres indígenas en la preservación y transmisión del conocimiento tradicional, brinda la oportunidad de reconocer y reflexionar sobre las diferentes formas en que los sistemas educativos tienen un impacto en los derechos de los pueblos indígenas, en particular de las mujeres y las niñas. Para ello, la Internacional de la Educación presenta una serie de blogs que recogen las voces y los puntos de vista de los pueblos indígenas y sus aliados de todo el mundo. La serie explora las distintas formas de trabajar de las y los expertos, activistas, investigadores y docentes del ámbito de la educación indígena para garantizar una educación de calidad centrada en los sistemas de conocimientos indígenas.
Si desean contribuir con un blog a esta serie, póngase en contacto con Lainie.Keper[at]ei-ie.org.
En el Centro Dechinta para la Investigación y el Aprendizaje nos une nuestra preocupación por cuidar la tierra, por cuidarnos los unos a los otros y nuestro deseo de revitalizar y practicar las formas indígenas de conocer y ser del norte de Canadá y más allá. Proporcionamos educación basada en la tierra y programas comunitarios culturalmente informados en colaboración con los integrantes y personas mayores de la comunidad local. Somos el único programa post-secundario acreditado del mundo que se basa en la tierra, lo que permite a nuestro alumnado obtener créditos universitarios mientras aprenden simultáneamente conocimientos y prácticas culturales, habilidades relacionadas con la tierra y teoría académica indígena sobre la tierra.
El informe pretende ser un complemento de la serie de seminarios web COVID-19 que Dechinta organizó en 2020. Todos los vídeos están disponibles en el sitio web www.dechinta.ca/COVID19 y en YouTube en https://www.youtube.com/c/DechintaCentre. Las transcripciones escritas de los seminarios web también están disponibles en el sitio web.
Las opiniones expresadas en este blog pertenecen al autor y no reflejan necesariamente ninguna política o posición oficial de la Internacional de la Educación.