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La Internacional de la Educación pone a disposición de los educadores y las educadoras una herramienta para respaldar el fortalecimiento de sus sindicatos

publicado 24 abril 2023 actualizado 21 marzo 2024

La Internacional de la Educación (IE) ha desarrollado una Herramienta para fortalecer los sindicatos y hacerlos más eficaces, gracias a la cual cada organización miembro puede llevar a cabo un proceso de autoevaluación y se le propone experimentar nuevas actividades con el objetivo de fortalecerse.

La herramienta está concebida como una manual, con tres partes diferenciadas que cada usuario/usuaria puede consultar de forma independiente o cronológica. La primera parte se centra en un proceso de autoevaluación; la segunda incluye un análisis DAFO (puntos fuertes, puntos débiles, oportunidades y amenazas); y la tercera acompaña al usuario/la usuaria a través de un proceso de planificación basado en la teoría del cambio.

Los sindicatos en plena tormenta

En su preámbulo, el manual subraya que muchos sindicatos de la educación de todo el mundo están afrontando numerosos retos. Los tres retos principales son:

  1. Presupuestos insuficientes para ofrecer una educación pública de calidad, y el crecimiento del sector privado.
  2. Salarios y condiciones de trabajo insatisfactorias, lo que hace que la profesión resulte poco atractiva.
  3. El hecho de que no se tenga suficientemente en cuenta a los sindicatos en el diálogo social.

A estos presupuestos públicos crónicamente insuficientes asignados a la educación hay que añadir la introducción anárquica de las nuevas tecnologías y el creciente recurso a actores privados, sobre todo durante la pandemia de COVID-19.

“La buena noticia es que, sean cuales sean las limitaciones políticas, económicas y sociales del país, los sindicatos siguen teniendo margen de acción. La organización interna del sindicato, sus prioridades estratégicas y su comunicación son ámbitos en los que un sindicato tiene plena libertad para proceder de manera distinta”, afirma en el preámbulo del manual David Edwards, secretario general de la Internacional de la Educación.

La renovación sindical como mentalidad

La renovación sindical es una prioridad estratégica de la IE, como se destaca concretamente en la Resolución “Renovación de los sindicatos de educación: el nuevo imperativo”, adoptada por el 8º Congreso Mundial de la IE en Bangkok (Tailandia), en julio de 2019.

Esta resolución hace un llamamiento al desarrollo de un “conjunto de instrumentos de renovación sindical”, es decir, un conjunto de recursos flexibles que permita tener en cuenta las diferencias culturales y contextuales, que ayude a las organizaciones afiliadas a reflexionar sobre las experiencias actuales y a lograr un cambio organizativo estratégico”.

Según el nuevo manual publicado por la IE, la renovación sindical consiste en adoptar una postura constructiva, teniendo presente que siempre se puede ser más eficaz, en un contexto repleto de retos: ¿Cómo adaptarse a los cambios profundos? ¿Cómo reinventar y repensar el funcionamiento de los sindicatos? El manual propone que los sindicatos de la educación implanten una mentalidad de cuestionamiento continuo de manera colectiva, inspirándose en las ideas y prácticas de otras organizaciones, y, paso a paso, avanzar en el marco de un proceso a largo plazo.

Los puntos en común de los sindicatos fuertes

El manual insiste en que no existe un modelo único de sindicato fuerte que bastaría con emular, puesto que cada sindicato es el resultado de una historia y funciona en un contexto político único. Por eso las comparaciones deben hacerse con mucha cautela. Sin embargo, basándose en la observación de sindicatos de diferentes partes del mundo, el manual identifica una serie de características comunes de los sindicatos fuertes.

El contacto constante con las educadoras y los educadores sobre el terreno, en el lugar de trabajo, y un excelente conocimiento de sus necesidades y expectativas, pueden ayudar a establecer las medidas necesarias para dar voz a los y las sindicalistas e intentar aportar respuestas concretas a sus problemas.

Otro factor de éxito identificado en el manual es la inclusividad, ya se trate de mujeres, de jóvenes o de educadoras y educadores que viven en zonas remotas, todos ellos y todas ellas con contratos precarios; es decir, todas las categorías habitualmente infrarrepresentadas en los sindicatos. Otros criterios importantes serían el hecho de ser una organización transparente y democrática, comunicar mejor y desarrollar alianzas.

Fortalecerse de forma metódica

La IE ha elaborado esta herramienta basándose en la diversidad de experiencias sindicales y consultando a afiliados/afiliadas y expertos/expertas, para ayudar a sus organizaciones miembros en el camino hacia la renovación sindical.

La primera parte de este documento explica cómo realizar un autodiagnóstico de la organización. El autodiagnóstico es un ejercicio de reflexión que permite obtener una imagen de la situación de la organización, de las estructuras y los procesos que la componen y de la forma en que funciona en su entorno.

La segunda parte ayuda a los educadores y las educadoras a comprobar dónde se sitúa el poder en el sindicato y cómo funciona mejor como organización, planteándose preguntas como: ¿Cuáles son los puntos fuertes y débiles del sindicato? ¿Qué oportunidades y amenazas provienen de su entorno y de la manera de actuar de la organización?

Y la tercera parte describe cómo definir una estrategia de acción: desde la identificación de objetivos y actividades, hasta la evaluación y el seguimiento de los resultados. La pregunta clave es: ¿qué cambio queremos conseguir?

Un conjunto de herramientas a su disposición

Como se explica en el prólogo del manual, “a diferencia de numerosos actores mundiales, que suelen estar organizados de arriba hacia abajo, la fuerza y la legitimidad de la Internacional de la Educación proceden de sus organizaciones miembros”. Esta estructura es la que sustenta sus acciones y permite a los sindicatos de la educación, a escala mundial, tomar la iniciativa y ser portavoz de la profesión docente y de los trabajadores y las trabajadoras de la educación organizados/as en su seno”.

Dirigiéndose a las organizaciones miembros, Edwards subraya que “esta herramienta es ahora de ustedes. Y de ustedes depende, como sindicatos organizados y comprometidos, darle vida y ponerla en práctica”.