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Por la pública: Movilizando a sindicatos y comunidades educativas del mundo entero

publicado 10 julio 2023 actualizado 12 julio 2023

La Presidenta de la Internacional de la Educación (IE), Susan Hopgood, ha inaugurado oficialmente el 9o Congreso Mundial de la IE, el primero celebrado en línea. El Congreso reunirá a delegados y delegadas que representan a organizaciones afiliadas a la IE de todo el mundo del 11-13 de julio. Su tema será: “Potenciar nuestros sindicatos, elevar nuestras profesiones, defender la democracia”.

Un Congreso mundial diferente

“Es difícil creer que la última vez en la que me dirigí al Congreso Mundial fue para clausurar nuestra reunión presencial mundial en Bangkok, la cual fue muy productiva”, afirmó Hopgood. “En aquel momento, establecimos un conjunto muy ambicioso y específico de objetivos. Ante la situación que enfrentábamos, visualizamos el mundo que queríamos para las personas docentes, para nuestro alumnado, familias, comunidades y naciones. Y tomamos la iniciativa”.

Luego vino la pandemia y “nunca hubiéramos imaginado una pandemia mundial fuera del ámbito de la ciencia ficción”, explicó Hopgood. “La decisión de celebrar dos Congresos Mundiales con un año de diferencia fue tomada por el Consejo Ejecutivo en 2021, en un momento en que los problemas provocados por la COVID hacían que fuera poco probable que delegados y delegadas pudieran reunirse presencialmente en las fechas previstas”.

El Consejo Ejecutivo de la IE decidió que el 9º Congreso en línea se limitaría a tratar lo que la Constitución de la IE exige que se decida en un Congreso Mundial ordinario. Esto es, las elecciones y los debates sobre resoluciones se aplazarán hasta el 10º Congreso Mundial, el cual tendrá lugar presencialmente en Buenos Aires el año que viene.

Persistencia de la profesión docente

Reflexionando sobre el periodo de la COVID, Hopgood se dirigió a las personas delegadas: “podéis estar muy orgullosos de la labor de la IE durante este periodo. Ninguna organización del mundo mantuvo tantas comunicaciones a distancia con sus afiliadas, participó tan enérgicamente en los niveles más altos de las Naciones Unidas o de la Organización Mundial de la Salud ni llevó a cabo intervenciones tan oportunas y pertinentes en colaboración con organizaciones afiliadas, y otras afines, para superar los efectos de esta pandemia como nuestra profesión a través de la IE”.

“Colegas, fuisteis persistentes, así que nosotros también lo fuimos”, añadió.

Señalando que “aunque tal vez lo peor de la crisis de la COVID haya pasado, sigue existiendo la necesidad de que continuemos siendo persistentes, frente a una especie de emergencia diferente y más crónica”, y se refirió a “la crisis del sector público, la capacidad de que los Gobiernos mantengan y promuevan el bien común y la capacidad de que la población exija responsabilidades a sus Gobiernos”.

Crisis de recursos en la educación pública

Hopgood también lamentó que estuvieran disminuyendo los recursos necesarios para el sector público para responder a las necesidades fundamentales de las personas y añadió que “las cifras son particularmente desalentadoras cuando se trata de la educación”. Declaró que los recursos de los sistemas educativos han disminuido en un 65% en los países de ingresos bajos y medios y en un 33% en los países de ingresos medios-altos y altos desde el inicio de la pandemia.

Lamentó el hecho de que cientos de millones de niñas, niños, jóvenes y adultos siguen excluidos de la educación, y otros tantos millones no tienen acceso a oportunidades de aprendizaje debido a entornos inadecuados, docentes no formados y a la falta de recursos educativos.

“Además, sabemos que hay una escasez mundial de docentes, un déficit de casi 70 millones de docentes en todo el mundo”, dijo Hopgood.

“¿Dónde están los recursos para financiar la educación?”, preguntó. “En todos los lugares, empezando por la deuda. Muy a menudo, una de las condiciones para obtener préstamos de autoridades mundiales de desarrollo o prestamistas nacionales es que los Estados priven de recursos al sector público, lo que implica la desfinanciación de la educación, la sanidad y otros servicios públicos. Mediante la restricción deliberada de lo que se denomina ‘la masa salarial docente’, los organismos de financiación mundiales bloquean la contratación y los salarios de docentes, lo que merma aún más el cuerpo de educadores profesionales”.

Hopgood subrayó que la no recaudación de miles de millones de dólares en impuestos impiden las inversiones responsables en el bien común y en economías que ofrezcan un crecimiento sostenible y amplio.

“No hay una falta de recursos para financiar la educación pública, sino una falta de voluntad política para que la educación sea la prioridad que el mundo necesita”, destacó. “Tenemos que velar por que la financiación pública se dirija a donde más se necesita, a fin de asegurar que cada estudiante tiene un docente formado profesionalmente, cualificado y con el apoyo adecuado en un entorno de aprendizaje de calidad. La inversión en el bien común es fundamental para la democracia y no hay una inversión mejor que la educación pública de calidad con docentes bien formados y retribuidos”.

Grupo de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre la profesión docente

Hopgood también indicó que el Grupo de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre la Profesión Docente creado recientemente examinará toda una serie de cuestiones relativas a la profesión docente y el apoyo que necesita para realizar adecuadamente su labor. En particular, para hacer frente a la escasez mundial de docentes, aumentar el profesionalismo y la financiación pública educativa: “Vuestro mensaje, nuestro mensaje sobre las personas docentes, guía el diálogo mundial sobre la educación: que deben ser apoyadas, valoradas y remuneradas adecuadamente, con cargas y condiciones de trabajo que apoyen el bienestar mental y físico y salarios negociados, semejantes a los de profesiones comparables. Además, se ha de poner fin a la contratación, o subcontratación, de personal docente no cualificado”.

“La financiación de los sistemas educativos públicos mejora las condiciones salariales y laborales y empodera al personal docente y de apoyo educativo para quedarse en la profesión que ama. Asimismo, inspira a una nueva generación a sumarse a la profesión que el mundo necesita desesperadamente”.

A continuación, dijo que la educación de calidad exige enseñanza de calidad para cada estudiante, en todas las circunstancias, lo que implica emplear a docentes cualificados con el nivel y las competencias apropiados. “No se trata solo de tener suficientes docentes. Docentes y personal de apoyo educativo cualificado son el pilar de los sistemas educativos con excelencia y equidad. Deben ser reconocidos como socios clave para la transformación de los sistemas educativos e involucrarlos en la planificación de políticas a través de la colaboración entre los Gobiernos y los sindicatos de la educación. Esto implica contar con mecanismos de diálogo social que garanticen el fortalecimiento del derecho a la libertad sindical y de negociación colectiva”.

También pidió que docentes y sindicatos alcen sus voces de nuevo a favor de “un nuevo contrato social, para llevar a la práctica nuestra capacidad para aunar fuerzas y unirnos para alcanzar una meta común y movilizar a nuestras comunidades educativas, a fin de vincular la crisis de financiación con el mundo sostenible que queremos crear”.

¡Por la pública! Creamos escuela

Hopgood presentó la campaña de la IE “¡Por la pública! Creamos escuela”, y explicó que esta campaña es “nuestra oportunidad para tomar la iniciativa y situar nuestra profesión a la cabeza del cambio real en nuestras naciones y comunidades”.

“Para que la equidad y la inclusión en el acceso a la educación sea una de las prioridades principales. Para garantizar la seguridad del alumnado y el profesorado. Para financiar adecuada y equitativamente la educación pública gratuita y de calidad para cada estudiante. Para integrar oportunidades y tecnología de forma equitativa en la educación pública, y para garantizar una educación de calidad sobre el cambio climático para todos”.

Añadiendo que “potenciando nuestros sindicatos y elevando nuestras profesiones, construimos y defendemos la democracia”, también reafirmó que “nuestros valores y principios, representados en más de 400 sindicatos con más de 32 millones de miembros en 178 países, son esenciales para mantener y potenciar sistemas democráticos sostenibles”.

“Entendemos nuestro poder. Nuestro poder para movilizar a nuestros sindicatos y comunidades para que interactúen con nuestros Gobiernos y les exijan responsabilidades en cuanto a la financiación adecuada del futuro a través de la educación de calidad”, concluyó Hopgood.

El discurso completo de Susan Hopgood está disponible aquí.

Les informaremos sobre el 9º Congreso Mundial de la IE en el sitio web de la IE y en nuestras plataformas de redes sociales ( #CongresoIE; Twitter: @eduint; Facebook: Education Internationa l; Instagram: eduint). ¡Síganos, difundan el mensaje y únanse a la conversación!