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En una carta de protesta fechada el 13 de julio de 2023 y dirigida al Ministro de Educación tunecino, Ali Mohamed Al Boughdiri, la Internacional de la Educación (IE) condena las sanciones salariales impuestas al personal docente sindicalista que reclama una mejor financiación de la educación en su país.

La IE ha protestado enérgica y formalmente contra la deducción de un mes de salario impuesta el 11 de julio a más de 17.000 docentes de enseñanza primaria en Túnez. Todos ellos miembros de la Fédération générale des enseignants de base (FGEB), afiliada a la IE, y rechazaron la propuesta del Gobierno.

Además, 500 directores/as escolares han sido destituidos de su cargo de dirección. Esta medida humillante también tiene como objetivo socavar el activismo sindical, deploró enérgicamente en su carta el Secretario General de la IE, David Edwards.

Subrayando que la FGEB sigue reclamando, entre otras reivindicaciones, la titularización de miles de docentes, aprobada por el Gobierno en un acuerdo concluido en 2018, también señaló que el personal docente sindicalista tunecino constata que Túnez sigue alejándose de la consecución del Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 (ODS4): “Garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos” y 4. c “Aumentar el número de docentes cualificados”.

“Lamentamos la notable ausencia de una Declaración de compromiso nacional del Gobierno tunecino tras la última Cumbre de la ONU sobre la Transformación de la Educación. El Gobierno ni siquiera participó en la reunión de la ONU sobre educación”, insistió Edwards.

Asimismo, reiteró: “Una financiación adecuada del sistema educativo público, que garantice la igualdad y la equidad, sigue siendo esencial para alcanzar el ODS 4”. Como saben, la Agenda Educación 2030 de la UNESCO, por ejemplo, pide a todos los gobiernos que dediquen entre el 4% y el 6% de su producto interior bruto y al menos entre el 15% y el 20% del gasto público a la financiación de sus sistemas educativos”.

La IE considera que la mejora de los resultados de la enseñanza y el aprendizaje requiere, entre otros elementos, la contratación de un número suficiente de docentes cualificados para cubrir la insuficiencia de personal, y que es esencial proporcionarles unas buenas condiciones de trabajo al tiempo que se implica a los sindicatos “en un diálogo social institucionalizado y de buena fe”.

Por consiguiente, la IE hace un llamamiento al Gobierno tunecino para que:

• Suspenda inmediata e incondicionalmente la retención de un mes de salario a miles de docentes sindicalistas de la enseñanza primaria;
• Anule la destitución de más de 500 directores/as de escuela;
• Reanude e institucionalice un diálogo social constructivo con los representantes de la FGEB, para implicarlos positivamente en la mejora del sistema educativo;
• Regularice la situación del personal docente que trabaja por contrato;
• Cumpla todos los compromisos adquiridos formalmente con los sindicatos de la educación;
• Aumente el presupuesto estructural asignado a la educación;
• Resista a las soluciones propuestas por las instituciones financieras internacionales basadas en medidas de austeridad, que lo único que hacen es reforzar las desigualdades en la educación y restringir los derechos fundamentales del profesorado; y
• Respetar en toda circunstancia las normas internacionales del trabajo.

La Internacional de la Educación, la federación sindical internacional del personal docente y el personal de apoyo a la educación, seguirá vigilando de cerca la situación en Túnez y ha informado a la Organización Internacional del Trabajo y a la Confederación Sindical Internacional de las medidas antisindicales aplicadas por el Gobierno tunecino.