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El Grupo de Alto Nivel de las Naciones Unidas sobre la Profesión Docente presenta sus recomendaciones de referencia para resolver la falta mundial de profesorado y potenciar la profesión

publicado 26 febrero 2024 actualizado 8 marzo 2024

El Grupo de Alto Nivel, convocado por la Secretaría General de las Naciones Unidas ante el alarmante déficit mundial de docentes, ha elaborado 59 recomendaciones para asegurar la valoración y el respeto al profesorado. El carácter abierto y progresista de estas recomendaciones es fruto de la incansable labor sindical y una oportunidad única de lograr un cambio real para millones de docentes y estudiantes de todo el mundo.

"Por primera vez en la historia, un Grupo de Alto Nivel de las Naciones Unidas ha estudiado la función del profesorado y el apoyo que necesitamos para hacer nuestro trabajo. Nuestro mensaje ha calado y ha suscitado un amplio consenso, lo que supone un gran avance. Las recomendaciones del Grupo nos aportan nuevas herramientas para transformar de verdad la educación. Ahora debemos asegurarnos de que la respuesta de nuestros Gobiernos esté a la altura", ha señalado Susan Hopgood, presidenta de la IE.

"El profesorado es fundamental para nutrir el recurso más grande de cada país: las mentes de su gente. Sin embargo, hoy enfrentamos una dramática escasez de docentes en todo el mundo, y millones de maestros y maestras carecen del apoyo, habilidades y capacitación continua que necesitan para enfrentar las demandas de sistemas educativos que cambian rápidamente", dijo el Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres.

"La Internacional de la Educación acoge con satisfacción el liderazgo de las Naciones Unidas a la hora de tomar posición sobre la escasez mundial de docentes y proponer soluciones integrales y eficaces. Me gustaría dar las gracias al Secretario General Guterres, así como a la Vicesecretaria General, Amina J. Mohammed, que inició y defendió este esfuerzo en beneficio de las personas docentes y sus estudiantes en todo el mundo", añadió David Edwards, Secretario General de la Internacional de la Educación, durante el lanzamiento de las recomendaciones.

Edwards también agradeció a la Organización Internacional del Trabajo y a la UNESCO su apoyo a la hora de hacer posible el trabajo del Grupo de Alto Nivel. "Los sindicatos de la educación están dispuestos a trabajar con los gobiernos para que se apliquen todas las Recomendaciones con carácter prioritario".

Un amplio consenso sobre la necesidad de mejorar las condiciones del profesorado en todo el mundo

El Grupo de Alto Nivel reúne a un grupo diverso de especialistas y partes interesadas que incluye a ministros y ministras de educación, expresidentes, figuras académicas, representantes de la sociedad civil y, lo que es más importante, docentes, estudiantes y sus sindicatos. La portavoz de la Internacional de la Educación en el Grupo fue la presidenta, Susan Hopgood.

Los sindicatos se encargaron de transmitir al Grupo la amplia variedad de problemas a los que se enfrenta el profesorado en distintos contextos y de reclamar un decidido apoyo a la profesión.

Como resultado de este trabajo, las 59 recomendaciones finales reflejan el sólido consenso al que llegó el Grupo y se hacen eco de las reivindicaciones de los sindicatos de todo el mundo.

Las recomendaciones se presentaron el 26 de febrero en Sudáfrica en un acto en el que participaron Susan Hopgood, presidenta de la Internacional de la Educación; Stefania Giannini, subdirectora general de Educación de la UNESCO; y Manuela Tomei, subdirectora general de la Organización Internacional del Trabajo.

Mugwena Maluleke, vicepresidente para África de la IE y secretario general del Sindicato Docente Democrático de Sudáfrica, destacó la importancia de las recomendaciones para la región: "No hay ningún lugar en el que las medidas para acabar con la falta de profesorado sean tan urgentes como en África: el continente más joven del mundo es el que tiene un mayor déficit de docentes. Las recomendaciones señalan claramente la ruta que debemos seguir para lograr una educación de calidad para todas y todos, que empieza por invertir en el personal educativo. Los sindicatos de África y del resto del mundo deben trasladar ese mensaje a sus Gobiernos y trabajar para garantizar que las recomendaciones se convierten en una realidad".

"Al marcar el 2024 como el Año de la Educación Africana, las recomendaciones del Panel de Alto Nivel llegan en un momento crucial para los sistemas de educación pública de nuestra región. Urgen a todos los gobiernos a realizar inversiones significativas en nuestros educadores. Este impulso por un profesorado calificado, bien remunerado y respaldado no solo aborda la urgente escasez de maestros, sino que también se alinea con la visión de la Unión Africana de 'Educar a un Africano apto para el Siglo XXI', garantizando el derecho de cada niña y cada niño a la educación. Los gobiernos deben actuar con decisión, reconociendo que valorar y respetar a nuestros maestros es fundamental para construir sistemas educativos resilientes para un aprendizaje inclusivo, de calidad, relevante y a lo largo de la vida", agregó Dennis Sinyolo, Director Regional de Educación Internacional para África.

Invertir en el profesorado es invertir en el futuro

Las 59 recomendaciones marcan el rumbo para transformar la educación mediante el impulso de la profesión docente.

Las recomendaciones inciden con gran acierto en que la inversión a largo plazo en el profesorado es la estrategia más eficaz para asegurar la calidad y la sostenibilidad de los sistemas educativos. El Grupo reclama una financiación equitativa para la educación y urge a los Gobiernos a protegerla de la austeridad. Demanda a las instituciones financieras internacionales, como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, que pongan fin a todas las medidas que restringen el gasto en educación y los salarios del profesorado.

Las recomendaciones instan a los Gobiernos a garantizar sueldos profesionales, competitivos y justos, a la altura de los de otras profesiones que requieren un nivel de cualificación similar. El empleo seguro, las buenas condiciones laborales, la adecuación de la carga de trabajo y la necesidad de priorizar el bienestar del profesorado también ocupan un lugar prominente en las recomendaciones de las Naciones Unidas.

Además, el Grupo de Alto Nivel indica que ha de haber una capacitación docente inicial de calidad que se financie con fondos públicos y que incluya becas para las y los futuros docentes. Recomienda un desarrollo profesional permanente de calidad, equitativo, gratuito, diseñado en colaboración con el profesorado y que forme parte de los cometidos oficiales. Los países deben trabajar para que todo el personal docente tenga un título universitario y para disponer de normas definidas por la profesión. Así mismo, deberá respetarse la autonomía profesional docente y el profesorado habrá de disponer del tiempo y los recursos necesarios para colaborar y crear comunidades de práctica.

Las recomendaciones incorporan un firme compromiso con la igualdad de género, la equidad y la diversidad. Los entornos de trabajo deben ser inclusivos, seguros y no discriminatorios para todo el personal educativo, sin excepciones. Debe fomentarse el liderazgo de las mujeres y el profesorado desplazado y refugiado debe contar con vías para integrarse en la fuerza laboral de la educación de las comunidades de acogida. El Grupo va más allá y pide a la comunidad internacional la creación de un Fondo Mundial para los Salarios del Profesorado. Ese fondo garantizará que las y los docentes que trabajan en contextos de crisis reciben su salario con regularidad y puntualmente de modo que puedan seguir enseñando y apoyando a las niñas y niños más vulnerables.

Es de destacar que las recomendaciones del Grupo ponen el diálogo social y político y la negociación colectiva en el centro de la transformación de la educación. El Grupo defiende la participación del profesorado y sus organizaciones en el desarrollo de las políticas educativas. Además, el Grupo ratifica su derecho a emprender acciones sindicales y subraya que las condiciones laborales deben fijarse a través del diálogo social, incluida la negociación colectiva.

El Grupo también aborda el papel de la tecnología en la educación, haciendo hincapié en que la relación entre docentes y estudiantes constituye el núcleo esencial del proceso educativo. El Grupo recomienda que el profesorado disfrute de autonomía para decidir cómo usar la tecnología en el aula. Invita a los Gobiernos a cooperar con el profesorado para crear políticas que contribuyan al aprendizaje y protejan los datos del alumnado.

De las recomendaciones a la acción

"El Grupo demanda la creación de comisiones nacionales formadas por los sindicatos educativos y los Gobiernos para resolver la escasez de docentes y supervisar la puesta en práctica de las recomendaciones. Tenemos que asegurarnos de que esas comisiones efectivamente ven la luz y de que abordan los complejos problemas a los que se enfrenta el profesorado. Es nuestro momento. Nuestra capacidad sindical puede transformar la educación en todo el mundo", afirmó David Edwards, secretario general de la IE.