Bélgica: los sindicatos de la educación se unen para poner fin a la escasez de docentes y a la austeridad
“Enseñar, no sangrar”. Este fue uno de los lemas utilizados entre los 8.000 educadores y educadoras procedentes de toda Bélgica que se congregaron en la capital, Bruselas, para exigir a los responsables políticos, en vísperas de las elecciones federales y europeas del 9 de junio, que aumenten la financiación asignada a la educación pública y pongan fin a la escasez de docentes.
Problemas similares en el norte y el sur del país
El hecho de que el profesorado francófono y el neerlandófono se manifiesten juntos es lo suficientemente raro como para mencionarlo. De hecho, no lo habían vuelto a hacer desde las grandes huelgas que sacudieron la enseñanza de lengua francesa en 1996. Desde la reforma del Estado, que confió a cada una de las tres Comunidades: la flamenca, la francesa y la germanófona, la gestión de su enseñanza, los sindicatos de la educación de cada una de estas Comunidades se dirigen a un Gobierno diferente. El norte y el sur del país gestionan su enseñanza como mejor les parece.
Sin embargo, todos los sindicatos belgas de la educación se enfrentan a las mismas dificultades: la necesidad de clases más pequeñas (15 alumnos/as como máximo al comienzo de la escolaridad obligatoria), el fin de las escuelas “gueto” en las que se concentra el alumnado con dificultades, más dinero para la enseñanza y tener en cuenta el aumento de la presión en el trabajo.
Por ello, los sindicatos de la educación flamencos han decidido apoyar las reivindicaciones del profesorado francófono enviando una delegación a manifestarse en las calles de Bruselas. La Centrale générale des services publics - Enseignement (CGSP-FGTB), la Confédération des Syndicats Chrétiens de l'Enseignement (CSC-Enseignement), el Syndicat Libre de la Fonction Publique (SLFP), ACOD-Onderwijs (ACOD), la Christelijke Onderwijscentrale (COC) el Christelijk Onderwijzersverbond (COV) y el Vrij Syndicaat van het Openbaar Ambt (VSOA) marcharon juntos.
En mayo, tres de los cuatro sindicatos flamencos de la educación, ACOD (socialista), COC (cristiano) y VSOA (liberal), organizarán varias jornadas de huelga y manifestaciones en un frente común.
Solidaridad sindical docente
¡Esta demostración de fuerza de los sindicatos de la educación belgas coincide plenamente con la campaña de la Internacional de la Educación, ¡Por la pública! Creamos escuela. Esta campaña es un llamamiento urgente a los Gobiernos de todo el mundo para que inviertan en la educación pública, un derecho humano fundamental y un bien público, y para que inviertan más en el profesorado, el factor más importante para lograr una educación de calidad.
A escala europea, los sindicatos de la educación han querido mostrar su apoyo a sus compañeras y compañeros belgas.
En Francia, el Syndicat général de l'éducation nationale-Confédération française et démocratique du travail señaló: “La escasez de docentes no solamente es una realidad en Francia, sino en la mayoría de los países del mundo, como aquí en Bélgica. La remuneración, el reconocimiento, las condiciones de trabajo, la autonomía... son cuestiones que los Gobiernos deben tener en cuenta”.
Desde Hungría, el Sindicato húngaro de docentes (SEH) anunció su apoyo a la lucha de su aliada la organización belga CSC-Enseignement: “¡Porque nosotros también luchamos por objetivos similares en Hungría! Actualmente, nuestros compañeros y compañeras belgas defienden objetivos como la reducción del número de alumnos por clase, lo cual mejora las condiciones de aprendizaje de niños y niñas, la reducción de las cargas administrativas, la protección del empleo, la mejora de las condiciones de trabajo y el aumento del gasto público en educación.
Para el SEH: “¡Los Estados no deberían considerar las subvenciones a la educación como una carga, sino como una inversión! Sin conocimiento y sin trabajadoras y trabajadores de la educación, ¡no hay futuro en ningún lugar del mundo!”
Además, los/las estudiantes de la Fédération des étudiants francophones ha decidido unirse a la manifestación para defender “su visión de una educación de calidad, accesible a todos y financiada en función de sus necesidades”. Por consiguiente, la refinanciación pública de la educación debe ser una prioridad para el próximo Gobierno, cualquiera que este sea, según la federación.