Canadá: la profesión docente de Quebec demanda que se agilicen las negociaciones
Alrededor de 450 docentes del norte de Quebec se han declarado en huelga hasta el 21 de enero para manifestar su frustración ante el estancamiento de las negociaciones. Exigen que se atienda a sus demandas y que estas se traduzcan en soluciones concretas.
La huelga se inició el pasado 16 de enero en presencia del presidente de la Association des employés du Nord québécois-Centrale des syndicats du Québec (AENQ-CSQ), Larry Imbeault y Tarek Khazen, el vicepresidente de la CSQ, Pascal Côté, el presidente de la Fédération des syndicats de l’enseignement (FSE-CSQ), Richard Bergevin, el presidente de la Fédération du personnel de soutien scolaire (FPSS-CSQ), Éric Pronovost, y el presidente de la Fédération des professionnelles et professionnels de l’éducation du Québec (FPPE-CSQ), Jacques Landry.
Gran movimiento de solidaridad
Durante los días laborables, los maestros y maestras en huelga de la región de Nunavik, representados por la AENQ-CSQ, organizarán piquetes frente a las escuelas de las 14 comunidades inuit de Quebec. En solidaridad con los colegas del norte, varios integrantes de la CSQ se reunieron el 16 de enero frente a las oficinas de la comisión escolar Kativik, en Montreal.
"Respaldados por un mandato del 88 %, iniciamos esta huelga para manifestar nuestra frustración ante el estancamiento de las negociaciones por la falta de voluntad de la patronal. Exigimos que se atienda a nuestras demandas y que estas se traduzcan en soluciones concretas para atraer y retener al personal en un contexto donde el Norte se enfrenta a una escasez aún mayor que el Sur. Persisten varios retos importantes, como las bonificaciones para atraer y retener al profesorado, el suministro de agua potable y la gestión de los incidentes violentos en las aulas. ¡Ya es hora de que esto se resuelva!", ha señalado Larry Imbeault, presidente de la AENQ-CSQ.
"Es lamentable que las negociaciones en el Norte sean tan largas y complejas, cuando el sistema educativo en el Sur llegó a un acuerdo hace más de un año. Esta diferencia es inaceptable y apoyamos plenamente a nuestros compañeros y compañeras de la AENQ-CSQ, que merecen mejores condiciones de trabajo". Dada la magnitud de las necesidades en los centros educativos del norte de Quebec, es urgente atender los graves problemas que repercuten tanto en las condiciones de vida y trabajo del personal como como en las condiciones de aprendizaje del alumnado", señalaron las organizaciones presentes en la manifestación.
Asimismo, recordaron que el personal de apoyo educativo también tiene un mandato de huelga en la mano que podría ejecutarse en cualquier momento si no se desbloquean las negociaciones con la comisión escolar Kativik.
CSQ: falta de voluntad política
Éric Gingras, presidente de la CSQ —afilada a la internacional de la Educación— considera que "es normal que las negociaciones concluyan después de las del sector público en el sur. Es algo que se esperaba. Ahora, llevamos un año de retraso con respecto al sector público del sur. Hay algo que claramente no funciona, porque entendemos las particularidades de la situación, pero que tome tanto tiempo... Esto refleja, en gran medida, una falta de voluntad política, sobre todo por parte de la comisión escolar" .
Demandas sindicales
"Entre los puntos en disputa se encuentran las bonificaciones para atraer y retener al profesorado, dado que las dificultades de contratación de las comunidades del norte son aún más graves que en el sur", ha señalado Gingras.
La CSQ también exige una mejor gestión de los incidentes violentos en las aulas.
La dirección de la comisión escolar Kativik —el empleador que negocia con el sindicato— se ha limitado a confirmar que el personal docente estaba en huelga "en todas nuestras escuelas y centros de educación para adultos" y que durante ese periodo no había actividades escolares.
Internacional de la Educación: llamamiento al diálogo social
La Internacional de la Educación apoya sin reservas a los y las colegas en huelga en Quebec y destaca que el diálogo social es un derecho fundamental de todos los trabajadores y trabajadoras. Asimismo, insta a las autoridades públicas competentes a entablar de inmediato negociaciones de buena fe con las organizaciones que representan a la profesión docente.
