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Gracias a mi experiencia docente en aulas universitarias y de secundaria, pronto me di cuenta de que el personal de apoyo educativo (PAE) es el pegamento que mantiene unidas nuestras escuelas públicas. Las primeras personas a las que ve el alumnado al llegar al centro y las últimas de las que se despide al bajar del autobús son las personas del PAE. La función del PAE es vital para garantizar que todo el alumnado se siente seguro, respetado y aceptado por QUIENES SON.

El entorno de aprendizaje inclusivo para el alumnado, en especial para el alumnado LGBTQ+, no se limita al aula. Se extiende a los pasillos, al autobús escolar, al gimnasio y las canchas deportivas, a la cafetería, a la enfermería, a las oficinas de administración... está en todos los sitios. Es el PAE el que ocupa esos espacios, así que cuando nuestro alumnado acude a ellos, DEBE encontrarse con un PAE que:

• Lleva una etiqueta identificativa con sus pronombres para que el alumnado sepa que respetamos el uso de pronombres.
• Lleva una bandera o un símbolo arcoíris para demostrar al alumnado que celebramos el día LGBTQ+ todos los días.
• Ofrece consejos, guía y orientación a todo el alumnado.
• Enseña educación para la salud y habla sobre ella.
• Anima en los encuentros deportivos escolares.
• Lee libros y artículos sobre temas LGBTQ+ y los comenta con el profesorado.
• Desempeña funciones de asesoría en alianzas gay-heterosexual (GSA) y otras agrupaciones inclusivas de estudiantes.
• Participa en las actividades del Mes del Orgullo dentro y fuera del centro escolar.
• Iza o cuelga la bandera del Orgullo en el mástil o el tablón del centro.
• Está presente en la comunidad LGBTQ+ y en acontecimientos sociales.
• Ataja los comportamientos reprobables para que el alumnado se sienta seguro.
• Usa baños de género neutro.

...Pero la lista no acaba aquí; podemos añadir incontables ejemplos.

Si el alumnado LGBTQ+ percibe la presencia del PAE en todos los ámbitos del centro escolar, ese alumnado deja de ver solo a un miembro del PAE y lo reconoce como un aliado que le ayudará a sentirse seguro, apoyado y valorado. El PAE acumula un sinfín de conocimientos que nuestras escuelas y comunidades deben aprovechar. La influencia positiva que el PAE tiene en el día a día de nuestro alumnado cambia y salva vidas. Aunque las funciones del PAE varíen de unos países a otros, mientras nuestro alumnado LGBTQ+ pueda relacionarse a diario con un PAE compuesto por personas adultas empáticas e implicadas, podrá desarrollar su pleno potencial.